De allí se fueron Balán y Balac a Quiriat Jusot.
Y fue Balaam con Balac, y vinieron a Quiriat-huzot.
Luego Balaam acompañó a Balac a Quiriat-huzot.
Balaam se fue luego con Balac y llegaron a Quiriat-Jusot.
Y Balaam fue con Balac, y llegaron a Queriat-hutsot.°
Entonces Balaán se fue con Balac, y ambos llegaron a Qiriat Jusot.
Y fue Balaam con Balac, y vinieron a la ciudad de Husot.
Por más que acuda Moab a sus altares paganos no logrará sino fatigarse; cuando vaya a orar a su santuario, todo lo que haga será en vano.
—¡Bueno, ya estoy aquí! —contestó Balán—. Solo que no podré decir nada que Dios no ponga en mi boca.
Balac ofreció en sacrificio vacas y ovejas, y las compartió con Balán y los oficiales que estaban con él.