El cetro no se apartará de Judá, ni de entre sus pies el bastón de mando, hasta que llegue el verdadero rey, quien merece la obediencia de los pueblos.
Mateo 2:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 “Pero tú, Belén, en la tierra de Judá, de ninguna manera eres la menor entre las principales ciudades de Judá; porque de ti saldrá un príncipe que será el pastor de mi pueblo Israel”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y tú, Belén, de la tierra de Judá, No eres la más pequeña entre los príncipes de Judá; Porque de ti saldrá un guiador, Que apacentará a mi pueblo Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente “Y tú, oh Belén, en la tierra de Judá, no eres la menor entre las ciudades reinantes de Judá, porque de ti saldrá un gobernante que será el pastor de mi pueblo Israel”. Biblia Católica (Latinoamericana) Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres en absoluto la más pequeña entre los pueblos de Judá, porque de ti saldrá un jefe, el que apacentará a mi pueblo, Israel. La Biblia Textual 3a Edicion Y tú, Bet-léhem, tierra de Judá, De ningún modo eres la menor entre los príncipes de Judá, Porque de ti saldrá un Caudillo que apacentará° a mi pueblo Israel.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y tú, Belén, tierra de Judá, de ningún modo eres la menor entre las grandes ciudades de Judá; porque de ti saldrá un jefe que gobernará a mi pueblo Israel'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y tú Belén, en la tierra de Judá, no eres la más pequeña entre los príncipes de Judá; porque de ti saldrá un Gobernador, que regirá a mi pueblo Israel. |
El cetro no se apartará de Judá, ni de entre sus pies el bastón de mando, hasta que llegue el verdadero rey, quien merece la obediencia de los pueblos.
Ya desde antes, cuando Saúl era nuestro rey, usted dirigía a Israel en sus campañas. Además el Señor le dijo a usted: “Tú pastorearás a mi pueblo Israel y lo gobernarás”».
Y aunque es verdad que Judá fue más poderoso que sus hermanos, y hasta llegó a ser su gobernante, la primogenitura pasó a José.
Como un pastor que cuida su rebaño, recoge los corderos en sus brazos; los lleva junto a su pecho, y guía con cuidado a las recién paridas.
Pero tú, Belén Efrata, pequeña entre los clanes de Judá, de ti saldrá el que gobernará a Israel; sus orígenes son de un pasado distante, desde tiempos antiguos.
De Jacob saldrá un conquistador, y destruirá a los sobrevivientes de la ciudad».
Después de que Jesús nació en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes, llegaron a Jerusalén unos sabios procedentes del Oriente.
Jesús se acercó entonces a ellos y dijo: —Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.
Y volvió a preguntarle: —Simón, hijo de Juan, ¿me amas? Pedro respondió: —Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Y Jesús le dijo: —Cuida de mis ovejas.
¿Acaso no dice la Escritura que el Cristo vendrá de la descendencia de David y que será de Belén, el pueblo de donde era David?».
Dios sometió todas las cosas al dominio de Cristo y lo dio como cabeza de todo a la iglesia.
Él es la cabeza del cuerpo, que es la iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, para ser en todo el primero.
Es evidente que nuestro Señor procedía de la tribu de Judá, respecto a la cual nada dijo Moisés con relación al sacerdocio.
Tocó el séptimo ángel su trompeta y en el cielo resonaron fuertes voces que decían: «El reino del mundo ha pasado a ser de nuestro Señor y de su Cristo, y él reinará por los siglos de los siglos».
—así como yo la he recibido de mi Padre— y »“él las gobernará con cetro de hierro; las hará pedazos como a vasijas de barro”.
Porque el Cordero que está en el trono los gobernará y los guiará a fuentes de agua viva, y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos.