Si las úlceras no se desarrollan ni la mancha blanca se extiende, sino que ha cicatrizado, declarará puro al enfermo.
Levítico 13:26 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Si al examinar la quemadura encuentra el sacerdote que el vello no se ha puesto blanco ni la mancha se ve más hundida que la piel, sino que ha disminuido, entonces aislará al enfermo durante siete días. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Mas si el sacerdote la mirare, y no apareciere en la mancha pelo blanco, ni fuere más profunda que la piel, sino que estuviere oscura, le encerrará el sacerdote por siete días. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, si el sacerdote no encuentra vello blanco en la zona afectada y ve que el problema no parece estar más profundo que la piel y ha disminuido, el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena por siete días. Biblia Católica (Latinoamericana) Si, en cambio, ve que no aparece pelo blanco en la mancha, que no está hundida la piel, recluirá la persona siete días. La Biblia Textual 3a Edicion Pero si el sacerdote la observa, y he aquí no aparece vello blanco en la mancha lustrosa, ni está más hundida que la piel sino que ha palidecido, el sacerdote lo hará recluir siete días. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero si el sacerdote, tras examinar la mancha, ve que el pelo de la mancha no se ha vuelto blanco y que la mancha no aparece más hundida que la piel, sino que ha tomado color pálido, el sacerdote le recluirá durante siete días. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero si el sacerdote la examinare, y no apareciere en la mancha pelo blanco, ni estuviere más profunda que la piel, sino que está oscura, entonces el sacerdote lo encerrará por siete días; |
Si las úlceras no se desarrollan ni la mancha blanca se extiende, sino que ha cicatrizado, declarará puro al enfermo.
el sacerdote deberá examinarla. Si el vello de la mancha se ha puesto blanco y la mancha misma se ve más hundida que la piel, se trata de una enfermedad contagiosa que brotó en el sitio de la quemadura. El sacerdote declarará impuro al enfermo, pues se trata de una enfermedad contagiosa.
Al séptimo día el sacerdote volverá a examinarlo y, si observa que la mancha se ha extendido sobre la piel, lo declarará impuro, pues se trata de una infección.