Cuando llegaron al lugar señalado por Dios, Abraham construyó un altar y preparó la leña. Después ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar, encima de la leña.
Levítico 1:7 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Los hijos de Aarón, los sacerdotes, harán fuego sobre el altar y echarán leña; Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego sobre el altar, y compondrán la leña sobre el fuego. Biblia Nueva Traducción Viviente Los hijos del sacerdote Aarón encenderán un fuego de leña sobre el altar, Biblia Católica (Latinoamericana) luego los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego en el altar y colocarán leña sobre el fuego;' La Biblia Textual 3a Edicion y los hijos de Aarón, los sacerdotes, harán fuego sobre el altar y acomodarán leña sobre el fuego. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego sobre el altar y echarán leña al fuego. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego sobre el altar, y acomodarán la leña sobre el fuego. |
Cuando llegaron al lugar señalado por Dios, Abraham construyó un altar y preparó la leña. Después ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar, encima de la leña.
Allí construyó un altar al Señor y ofreció holocaustos y sacrificios de comunión. Luego oró al Señor y, en respuesta, Dios envió fuego del cielo sobre el altar del holocausto.
Cuando Salomón terminó de orar, descendió fuego del cielo y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria del Señor llenó el Templo.
También organicé la contribución de la leña en las fechas establecidas, y la entrega de las primicias. «¡Acuérdate de mí, Dios mío, y favoréceme!».
De la presencia del Señor salió un fuego que consumió el holocausto y la grasa que estaban sobre el altar. Al ver esto, todo el pueblo prorrumpió en gritos de júbilo y cayó rostro en tierra.
¡Cómo quisiera que alguno de ustedes cerrara las puertas del Templo, para que no encendieran en vano el fuego de mi altar! No estoy nada contento con ustedes —dice el Señor de los Ejércitos— y no voy a aceptar ni una sola ofrenda de sus manos.