Y los demás profetas vaticinaban lo mismo: «Ataque usted a Ramot de Galaad y vencerá, porque el Señor la entregará en manos de Su Majestad».
Jueces 18:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 El sacerdote respondió: —Vayan en paz. Su viaje tiene la aprobación del Señor. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y el sacerdote les respondió: Id en paz; delante de Jehová está vuestro camino en que andáis. Biblia Nueva Traducción Viviente —Vayan en paz —respondió el sacerdote— porque el Señor estará vigilando el camino por donde van. Biblia Católica (Latinoamericana) El sacerdote les dijo: '¡Vayan en paz! Su viaje está bajo la protección de Dios'. La Biblia Textual 3a Edicion Y el sacerdote les respondió: ¡Id en paz! En presencia de YHVH está el camino por el cual andáis. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondióles el sacerdote: 'Id en paz, pues el viaje que hacéis está bajo la mirada de Yahveh'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el sacerdote les respondió: Id en paz, que vuestro viaje que hacéis es delante de Jehová. |
Y los demás profetas vaticinaban lo mismo: «Ataque usted a Ramot de Galaad y vencerá, porque el Señor la entregará en manos de Su Majestad».
Cuando compareció ante el rey, este le preguntó: —Micaías, ¿debemos ir a la guerra contra Ramot de Galaad o no? —Ataque y vencerá —contestó él—, porque el Señor la ha entregado en manos de Su Majestad.
Así que el rey de Israel reunió a los profetas, que eran unos cuatrocientos y les preguntó: —¿Debo ir a la guerra contra Ramot de Galaad o no? —Vaya usted —contestaron ellos—, porque el Señor la ha entregado en manos de Su Majestad.
Los ojos del Señor están sobre los que le temen; de los que esperan en su gran amor.
Moisés se fue de allí y volvió a la casa de Jetro, su suegro. Al llegar, le dijo: —Debo marcharme. Quiero volver a Egipto, donde están mis hermanos de sangre. Voy a ver si todavía viven. —Anda, pues; que te vaya bien —contestó Jetro.
«Yo estoy contra los profetas que cuentan sueños mentirosos y que, al contarlos, hacen que mi pueblo se extravíe con sus mentiras y sus presunciones», afirma el Señor. «Yo no los he enviado ni he dado ninguna orden. No traen ningún beneficio a este pueblo», afirma el Señor.
El Señor su Dios es quien la cuida; los ojos del Señor su Dios están sobre ella todo el año, de principio a fin.
Que el Dios y Padre nuestro, y nuestro Señor Jesús, nos preparen el camino para ir a verlos.
Le dijeron: —Te rogamos que consultes a Dios para que sepamos si vamos a tener éxito en nuestro viaje.
Los cinco hombres se fueron y llegaron a Lais, donde vieron que la gente vivía segura, tranquila y confiada, tal como vivían los sidonios. Gozaban de prosperidad y no les faltaba nada. Además, vivían lejos de los sidonios y no se relacionaban con nadie más.
—Vete en paz —respondió Elí—. Que el Dios de Israel te conceda lo que has pedido.