Juan 6:64 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Sin embargo, hay algunos de ustedes que no creen. Es que Jesús conocía desde el principio quiénes eran los que no creían y quién era el que iba a traicionarlo. Así que añadió: Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar. Biblia Nueva Traducción Viviente pero algunos de ustedes no me creen». (Pues Jesús sabía, desde un principio, quiénes eran los que no creían y también quién lo traicionaría). Biblia Católica (Latinoamericana) Pero hay entre ustedes algunos que no creen.
Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían y quién lo iba a entregar. La Biblia Textual 3a Edicion Pero hay entre vosotros algunos que no creen (porque desde el principio sabía Jesús quiénes eran los que no creían y quién era el que lo había de entregar). Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero hay entre vosotros algunos que no creen'. Efectivamente, Jesús sabía ya desde el principio quiénes eran los que no creían y quién era el que lo iba a entregar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién le iba a traicionar. |
Jesús, que sabía todo lo que iba a suceder, les salió al encuentro. —¿A quién buscan? —preguntó.
Al escucharlo, muchos de sus discípulos exclamaron: «Esta enseñanza es muy difícil; ¿quién puede aceptarla?».
Jesús, muy consciente de que sus discípulos murmuraban por lo que había dicho, les reprochó: —¿Esto les causa tropiezo?
Desde entonces muchos de sus discípulos le volvieron la espalda y ya no andaban con él.
—Ustedes son de aquí abajo —continuó Jesús—; yo soy de allá arriba. Ustedes son de este mundo; yo no soy de este mundo.
aunque no lo conocen. Yo, en cambio, sí lo conozco. Si dijera que no lo conozco, sería tan mentiroso como ustedes; pero lo conozco y cumplo su palabra.
Porque a los que Dios conoció de antemano, también los predestinó a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
A pesar de todo, el fundamento de Dios es sólido y se mantiene firme, pues está sellado con esta inscripción: «El Señor conoce a los suyos», y esta otra: «Que se aparte de la maldad todo el que invoca el nombre del Señor».
Ninguna cosa creada escapa a la vista de Dios. Todo está al descubierto, expuesto a los ojos de aquel a quien hemos de rendir cuentas.