Juan 5:38 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 ni vive su palabra en ustedes, porque no creen en aquel a quien él envió. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 ni tenéis su palabra morando en vosotros; porque a quien él envió, vosotros no creéis. Biblia Nueva Traducción Viviente y no tienen su mensaje en el corazón, porque no creen en mí, que soy a quien el Padre les ha enviado. Biblia Católica (Latinoamericana) y tampoco tienen su palabra, pues no creen al que él ha enviado. La Biblia Textual 3a Edicion ni tenéis su palabra permaneciendo en vosotros, porque a quien Él envió, a Éste vosotros no creéis. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ni tenéis su palabra que permanezca en vosotros, porque no creéis a aquel a quien Él envió. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y no tenéis su palabra morando en vosotros; porque al que Él envió, a Éste vosotros no creéis. |
Aunque al malvado se le tenga compasión, no aprende lo que es justicia; en tierra de rectitud actúa con iniquidad y no reconoce la majestad del Señor.
Así dice el Señor, el Redentor y Santo de Israel, al despreciado y aborrecido por las naciones, al siervo de los gobernantes: «Los reyes te verán y se pondrán de pie, los príncipes te verán y se postrarán, por causa del Señor, el Santo de Israel, que es fiel y te ha escogido».
Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se les concederá.
Yo sé que ustedes son descendientes de Abraham. Sin embargo, procuran matarme porque no está en sus planes aceptar mi palabra.
Que habite en ustedes la palabra de Cristo con toda su riqueza: instrúyanse y aconséjense unos a otros con toda sabiduría; canten salmos, himnos y canciones espirituales a Dios, con gratitud de corazón.
Recita siempre el libro de la Ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito.
Les he escrito a ustedes, padres, porque han conocido al que es desde el principio. Les he escrito a ustedes, jóvenes, porque son fuertes, la palabra de Dios permanece en ustedes, y han vencido al maligno.