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Juan 18:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Jesús, que sabía todo lo que iba a suceder, les salió al encuentro. —¿A quién buscan? —preguntó.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Pero Jesús, sabiendo todas las cosas que le habían de sobrevenir, se adelantó y les dijo: ¿A quién buscáis?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Jesús ya sabía todo lo que le iba a suceder, así que salió al encuentro de ellos. —¿A quién buscan? —les preguntó.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Jesús, que sabía todo lo que le iba a suceder, se adelantó y les dijo: '¿A quién buscan?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Jesús, por tanto, sabiendo todo lo que le iba a sobrevenir, salió y les dice: ¿A quién buscáis?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Sabiendo Jesús todo lo que le iba a sobrevenir, se adelantó y les dijo: '¿A quién buscáis?'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pero Jesús, sabiendo todas las cosas que habían de venir sobre Él, salió y les dijo: ¿A quién buscáis?

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Otras versiones



Juan 18:4
27 Referencias Cruzadas  

Tan cierto como que el Señor su Dios vive, no hay nación ni reino adonde mi amo no haya mandado a buscarlo. Y a quienes afirmaban que usted no estaba allí, él los hacía jurar que no lo habían encontrado.


Pero yo respondí: «¡Yo no soy de los que huyen! ¡Los hombres como yo no corren a esconderse en el Templo para salvar la vida! ¡No me esconderé!».


Aun cuando un ejército me asedie, no temerá mi corazón; aun cuando una guerra estalle contra mí, yo mantendré la confianza.


No me asustan los miles de escuadrones que me acosan por doquier.


El malvado huye aunque nadie lo persiga; pero el justo vive confiado como un león.


Desde entonces comenzó Jesús a advertir a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y sufrir muchas cosas a manos de los líderes religiosos, de los jefes de los sacerdotes y de los maestros de la Ley; también que era necesario que lo mataran y que al tercer día resucitara.


«Como ya saben, faltan dos días para la Pascua y el Hijo del hombre será entregado para que lo crucifiquen».


Mientras comían, dijo: —Les aseguro que uno de ustedes me va a traicionar.


—Esta misma noche —dijo Jesús— todos ustedes me abandonarán, porque está escrito: »“Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas del rebaño”.


Luego dijo: —Cuando todavía estaba yo con ustedes, les decía que tenía que cumplirse todo lo que está escrito acerca de mí en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los Salmos.


Se acercaba la fiesta de la Pascua. Jesús sabía que le había llegado la hora de abandonar este mundo para volver al Padre. Y habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin.


Jesús sabía quién lo iba a traicionar y por eso dijo que no todos estaban limpios.


—A Jesús de Nazaret —contestaron. Jesús dijo: —Yo soy. Judas, el traidor, también estaba con ellos.


—¿A quién buscan? —volvió a preguntar Jesús. —A Jesús de Nazaret —repitieron.


Después de esto, como Jesús sabía que ya todo había terminado y para que se cumpliera la Escritura, dijo: —Tengo sed.


Sin embargo, hay algunos de ustedes que no creen. Es que Jesús conocía desde el principio quiénes eran los que no creían y quién era el que iba a traicionarlo. Así que añadió:


Me has dado a conocer los caminos de la vida; me llenarás de alegría en tu presencia”.


Por tanto, ya que Cristo sufrió en el cuerpo, asuman también ustedes la misma actitud; porque el que ha sufrido en el cuerpo ha roto con el pecado,