Si David mismo lo llama “Señor”, ¿cómo puede entonces ser su descendiente? La muchedumbre lo escuchaba con agrado.
Juan 12:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Mientras tanto, muchos de los judíos se enteraron de que Jesús estaba allí y fueron a ver no solo a Jesús, sino también a Lázaro, a quien Jesús había resucitado. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Gran multitud de los judíos supieron entonces que él estaba allí, y vinieron, no solamente por causa de Jesús, sino también para ver a Lázaro, a quien había resucitado de los muertos. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando toda la gente se enteró de que Jesús había llegado, corrieron en masa para verlo a él y también a Lázaro, el hombre al que Jesús había resucitado de los muertos. Biblia Católica (Latinoamericana) Muchos judíos supieron que Jesús estaba allí y fueron, no sólo por ver a Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. La Biblia Textual 3a Edicion Y una gran multitud de judíos supo que estaba° allí, y fueron no sólo por causa de Jesús, sino también para ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Gran multitud de judíos se enteró de que Jesús estaba allí y acudieron, no solamente por Jesús, sino también por ver a Lázaro, al que había resucitado de entre los muertos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces mucha gente de los judíos supieron que Él estaba allí; y vinieron no solamente por causa de Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de los muertos. |
Si David mismo lo llama “Señor”, ¿cómo puede entonces ser su descendiente? La muchedumbre lo escuchaba con agrado.
Seis días antes de la Pascua llegó Jesús a Betania, donde vivía Lázaro, a quien Jesús había resucitado.
Al día siguiente, muchos de los que habían ido a la fiesta se enteraron de que Jesús se dirigía a Jerusalén.
La gente que había estado con Jesús cuando él llamó a Lázaro del sepulcro y lo resucitó de entre los muertos seguía difundiendo la noticia.
Además, como vieron que los acompañaba el hombre que había sido sanado, no tenían nada que alegar.