La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




Génesis 28:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Que también te dé, a ti y a tu descendencia, la bendición de Abraham, para que puedan poseer esta tierra donde ahora vives como extranjero, esta tierra que Dios prometió a Abraham.

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

y te dé la bendición de Abraham, y a tu descendencia contigo, para que heredes la tierra en que moras, que Dios dio a Abraham.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Que Dios te dé a ti y a tu descendencia las bendiciones que prometió a Abraham. Que llegues a ser dueño de esta tierra donde ahora vives como extranjero, porque Dios le entregó esta tierra a Abraham.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Que Dios te conceda la bendición de Abrahán, a ti y a tu descendencia, para que te hagas dueño de la tierra en que ahora vives, y que Dios dio a Abrahán.

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

y te dé la bendición de Abraham,° a ti y a tu descendencia contigo, para hacer que tomes posesión de la tierra de tus peregrinaciones,° la cual ’Elohim ha dado a Abraham.

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

y te dé la bendición de Abrahán, a ti y a tus descendientes, para que poseas la tierra en la cual has morado como forastero y que Dios entregó a Abrahán'.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y te dé la bendición de Abraham, y a tu simiente contigo, para que heredes la tierra de tus peregrinaciones, que Dios dio a Abraham.

Ver Capítulo
Otras versiones



Génesis 28:4
20 Referencias Cruzadas  

Allí el Señor se apareció a Abram y le dijo: «Yo daré esta tierra a tu descendencia». Entonces Abram edificó un altar al Señor, porque se le había aparecido.


Pero Abram preguntó: —Mi Señor y Dios, ¿cómo sabré que voy a poseerla?


Isaac comenzó a temblar y muy sobresaltado dijo: —¿Quién fue el que ya me trajo lo que había cazado? Poco antes de que llegaras, yo me lo comí todo. ¡Ya le di mi bendición y no puedo quitársela!


Jacob se estableció en la tierra de Canaán, donde su padre había residido como extranjero.


Ante ti, somos extranjeros que están de paso, como lo fueron nuestros antepasados. Nuestros días sobre la tierra son solo una sombra sin esperanza.


»Señor, escucha mi oración, atiende a mi clamor; no te desentiendas de mi llanto. Ante ti soy un extranjero, alguien que está de paso, como todos mis antepasados.


Que su nombre perdure para siempre; que su fama permanezca como el sol. Que en su nombre sean bendecidas las naciones; que todas ellas lo proclamen dichoso.


También con ellos confirmé mi pacto de darles la tierra de Canaán, donde residieron como forasteros.


Así sucedió para que, por medio de Cristo Jesús, la bendición prometida a Abraham llegara a las naciones, y para que por la fe recibiéramos el Espíritu según la promesa.


En efecto, la Escritura, habiendo previsto que Dios justificaría por la fe a las naciones, anunció de antemano el evangelio a Abraham: «Por medio de ti serán bendecidas todas las naciones».


Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo.