Sara, por su parte, lo negó porque tuvo miedo y dijo: —Yo no me estaba riendo. Pero él respondió: —Sí te reíste.
Génesis 18:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Luego aquellos visitantes se levantaron y partieron de allí en dirección a Sodoma. Abraham los acompañó para despedirlos. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y los varones se levantaron de allí, y miraron hacia Sodoma; y Abraham iba con ellos acompañándolos. Biblia Nueva Traducción Viviente Después de haber comido, los hombres se levantaron y miraron hacia Sodoma. Cuando salieron, Abraham caminó un tramo con ellos para despedirlos. Biblia Católica (Latinoamericana) Los hombres se levantaron y marcharon en dirección de Sodoma, mientras Abrahán los acompañaba para indicarles el camino. La Biblia Textual 3a Edicion Y levantándose de allí aquellos varones, dirigieron la mirada° a Sodoma, y Abraham fue con ellos para despedirlos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los tres hombres se levantaron y dirigieron su mirada hacia Sodoma. Abrahán iba con ellos para despedirlos Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los varones se levantaron de allí, y miraron hacia Sodoma: y Abraham iba con ellos acompañándolos. |
Sara, por su parte, lo negó porque tuvo miedo y dijo: —Yo no me estaba riendo. Pero él respondió: —Sí te reíste.
Abraham alzó la vista y vio a tres hombres de pie cerca de él. Al verlos, corrió desde la entrada de la tienda a saludarlos. Postrándose en tierra,
Dos de los visitantes partieron de allí y se encaminaron a Sodoma, pero Abraham se quedó de pie frente al Señor.
Caía la tarde cuando los dos ángeles llegaron a Sodoma. Lot estaba sentado a la entrada de la ciudad. Al verlos, se levantó para recibirlos y se postró rostro en tierra.
Enviados por la iglesia, al pasar por Fenicia y Samaria contaron cómo se habían convertido los no judíos. Estas noticias llenaron de alegría a todos los creyentes.
Lo que más los entristecía era su declaración de que ellos no volverían a verlo. Luego lo acompañaron hasta el barco.
Pero al cabo de algunos días, partimos y continuamos nuestro viaje. Todos los discípulos, incluso las mujeres y los niños, nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad, y allí en la playa nos arrodillamos y oramos.
tengo planes de visitarlos cuando vaya rumbo a España. Espero que, después de que haya disfrutado de la compañía de ustedes por algún tiempo, me ayuden a continuar el viaje.
Delante de la iglesia ellos han dado testimonio de tu amor. Harás bien en ayudarlos a seguir su viaje, como es digno de Dios.