Luego Dios el Señor dijo: «No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada».
Eclesiastés 4:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Mejor son dos que uno, porque obtienen más fruto de su esfuerzo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Biblia Nueva Traducción Viviente Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Biblia Católica (Latinoamericana) Más vale estar de a dos que solo: el trabajo rendirá más. La Biblia Textual 3a Edicion Dos pueden más que uno, porque tienen mejor paga por su trabajo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mejor dos juntos que uno solo, porque logran mayor fruto de su trabajo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga por su trabajo. |
Luego Dios el Señor dijo: «No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada».
A Abisay le ordenó: «Si los arameos pueden más que yo, tú vendrás a rescatarme; y si los amonitas pueden más que tú, yo te rescataré.
Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quien lo levante!
Vi a un hombre solitario, sin hijos ni hermanos. Nunca dejaba de afanarse; ¡jamás le parecían demasiadas sus riquezas! «¿Para quién trabajo tanto», se preguntó, «y me abstengo de las cosas buenas?». ¡También esto es vanidad y una penosa tarea!
Y el Señor inquietó el espíritu de Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el del sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac; también el espíritu del resto del pueblo. Así que vinieron y empezaron a trabajar en la casa de su Dios, el Señor de los Ejércitos.
Yo solo no puedo con todo este pueblo. ¡Es una carga demasiado pesada para mí!
Reunió a los doce y comenzó a enviarlos de dos en dos, dándoles autoridad sobre los espíritus malignos.
ya mismo el segador recibe su salario y recoge el fruto para vida eterna. Ahora, tanto el sembrador como el segador se alegran juntos.
Mientras participaban en el culto al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: «Apártenme ahora a Bernabé y a Saulo para el trabajo al que los he llamado».
Cuídense de no echar a perder el fruto de nuestro trabajo; procuren más bien recibir la recompensa completa.
¡Que el Señor te recompense por lo que has hecho! Que el Señor, Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte, te lo pague con creces.