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Eclesiastés 3:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

tiempo para llorar y tiempo para reír; tiempo para estar de luto y tiempo para bailar;

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Un tiempo para llorar y un tiempo para reír. Un tiempo para entristecerse y un tiempo para bailar.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

tiempo para llorar y tiempo para reír; tiempo para gemir y tiempo para bailar;'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Tiempo de llorar y tiempo de reír, Tiempo de endechar y tiempo de bailar,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Hay tiempo de llorar y tiempo de reír. Hay tiempo de gemir, y tiempo de bailar.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de lamentar, y tiempo de danzar;

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Otras versiones



Eclesiastés 3:4
23 Referencias Cruzadas  

Sara dijo entonces: «Dios me ha hecho reír, y todos los que se enteren de que he tenido un hijo se reirán conmigo.


Sucedió que al entrar el arca del Señor a la Ciudad de David, la hija de Saúl, Mical, se asomó a la ventana y, cuando vio que el rey David estaba saltando y bailando delante del Señor, sintió por él un profundo desprecio.


Convertiste mi lamento en danza; me quitaste la ropa de luto y me vestiste de alegría,


Porque solo un instante dura su enojo, pero su buena voluntad, toda una vida. Si por la noche hay llanto, por la mañana habrá gritos de alegría.


Entonces Miriam la profetisa, hermana de Aarón, tomó un pandero y, mientras todas las mujeres la seguían danzando y tocando panderos,


tiempo para esparcir piedras y tiempo para recogerlas; tiempo para abrazarse y tiempo para apartarse;


Cuando te vengan buenos tiempos, disfrútalos; pero cuando te lleguen los malos, piensa que unos y otros son obra de Dios, y que nadie sabe con qué habrá de encontrarse después.


¡Consuelen, consuelen a mi pueblo! —dice su Dios—.


Hablen con ternura a Jerusalén y anúncienle que ya ha cumplido servicio obligatorio, que ya ha pagado por su iniquidad, que ya ha recibido de la mano del Señor el doble por todos sus pecados.


»“Tocamos la flauta y ustedes no bailaron; cantamos por los muertos y ustedes no lloraron”.


Jesús contestó: —¿Acaso pueden estar de luto los invitados del novio mientras él está con ellos? Llegará el día en que se les quitará el novio; entonces sí ayunarán.


Sus vecinos y parientes se enteraron de que el Señor le había mostrado gran misericordia y compartieron su alegría.


Alégrense con los que están alegres; lloren con los que lloran.


La tristeza que proviene de Dios produce el arrepentimiento que lleva a la salvación, de la cual no hay que arrepentirse, mientras que la tristeza del mundo produce la muerte.


Reconozcan sus miserias, lloren y laméntense. Que su risa se convierta en llanto y su alegría, en tristeza.