He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, me he mantenido en la fe.
Apocalipsis 14:12 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 En esto consiste la perseverancia de los creyentes, los cuales obedecen los mandamientos de Dios y se mantienen fieles a Jesús. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. Biblia Nueva Traducción Viviente Esto significa que el pueblo de Dios tiene que soportar la persecución con paciencia, obedeciendo sus mandamientos y manteniendo la fe en Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Este es el tiempo de aguantar para los santos, para todos aquellos que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. La Biblia Textual 3a Edicion Aquí está la perseverancia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Ésta es la hora de la constancia del pueblo santo, de los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Aquí está la paciencia de los santos; aquí están los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. |
He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, me he mantenido en la fe.
Entonces el dragón se enfureció contra la mujer y se fue a hacer guerra contra el resto de sus descendientes, los cuales obedecen los mandamientos de Dios y se mantienen fieles al testimonio de Jesús.
El que deba ser llevado cautivo, a la cautividad irá. El que deba morir a espada, a filo de espada morirá. ¡En esto consisten la perseverancia y la fidelidad de los creyentes!
»Sé dónde vives: allí donde Satanás tiene su trono. Sin embargo, sigues fiel a mi nombre. No renegaste de tu fe en mí ni siquiera en los días en que Antipas, mi testigo fiel, sufrió la muerte en esa ciudad donde vive Satanás.
Ya que has guardado mi mandato de ser constante, yo por mi parte te guardaré de la hora de prueba, que vendrá sobre el mundo entero para poner a prueba a los que viven en la tierra.
»Conozco tus obras. Mira que delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar. Ya sé que tus fuerzas son pocas, pero has obedecido mi palabra y no has renegado de mi nombre.