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1 Pedro 3:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Tal es el caso de Sara, que obedecía a Abraham y lo llamaba su señor. Ustedes son hijas de ella si hacen el bien y viven sin ningún temor.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Por ejemplo, Sara obedecía a su esposo, Abraham, y lo llamaba «señor». Ustedes son sus hijas cuando hacen lo correcto sin temor a lo que sus esposos pudieran hacer.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Así obedecía Sara a Abrahán, al que llamaba su señor. Ustedes serán hijas de Sara si obran el bien sin tener miedo a nada.

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La Biblia Textual 3a Edicion

como Sara obedecía a Abraham, llamándolo señor;° de la cual vosotras fuisteis hechas hijas° haciendo el bien, sin temer a ninguna amenaza.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Así Sara obedeció a Abrahán y le llamó señor. Vosotras os hacéis hijas suyas, cuando practicáis el bien y no tenéis miedo alguno.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras sois hechas hijas, haciendo el bien, y no teniendo temor de ninguna amenaza.

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Otras versiones



1 Pedro 3:6
12 Referencias Cruzadas  

Por eso, Sara se rio para sus adentros y dijo: «¿Acaso voy a tener este placer, ahora que ya he envejecido y siendo mi señor también ya viejo?».


Sara, por su parte, lo negó porque tuvo miedo y dijo: —Yo no me estaba riendo. Pero él respondió: —Sí te reíste.


El rey está cautivado por tu hermosura; él es tu señor: póstrate ante él.


»¿Quién te asustó, quién te metió miedo, que me has engañado? No te acordaste de mí ni me tomaste en cuenta. ¿Será que no me temes porque guardé silencio tanto tiempo?


Pero Pedro y Juan replicaron: —¿Es justo delante de Dios obedecerlos a ustedes en vez de obedecerlo a él? ¡Júzguenlo ustedes mismos!


Despuntaba el alba cuando la mujer volvió y se desplomó a la entrada de la casa donde estaba hospedado su marido. Allí se quedó hasta que amaneció.