Entonces saltará el cojo como el ciervo, la lengua del mudo cantará. Pues manarán aguas en la estepa, habrá torrenteras en el desierto;
Juan 5:9 - La Palabra (versión española) En aquel mismo instante, el enfermo quedó curado, recogió su camilla y comenzó a andar. Pero aquel día era sábado. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Al instante, el hombre quedó sano! Enrolló la camilla, ¡y comenzó a caminar! Pero ese milagro sucedió el día de descanso, Biblia Católica (Latinoamericana) Al instante el hombre quedó sano, tomó su camilla y empezó a caminar.
Pero aquel día era sábado. La Biblia Textual 3a Edicion E inmediatamente el hombre quedó sano, y alzó su catre y echó a andar.° Y era sábado aquel° día. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y al instante, el hombre quedó sano, tomó su camilla y se puso a andar. Pero aquel día era sábado. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era sábado aquel día. |
Entonces saltará el cojo como el ciervo, la lengua del mudo cantará. Pues manarán aguas en la estepa, habrá torrenteras en el desierto;
Así dice el Señor: Andaos con cuidado y no transportéis cargas en sábado ni las metáis por las puertas de Jerusalén.
Él entonces se acercó, la tomó de la mano e hizo que se levantara. Al instante le desapareció la fiebre y se puso a atenderlos.
Jesús le dijo: —Puedes irte. Tu fe te ha sanado. Al punto recobró la vista y siguió a Jesús por el camino.
Y, efectivamente, le desapareció de inmediato la causa de sus hemorragias y sintió que había quedado curada de su enfermedad.
Poco después, Jesús se encontró con él en el Templo y le dijo: —Ya ves que has sido curado; no vuelvas a pecar para que no te suceda algo peor.
Si, pues, circuncidáis incluso en sábado para no quebrantar una ley impuesta por Moisés, ¿por qué os indignáis tanto contra mí que he curado por completo a una persona en sábado?
pues el día en que Jesús había hecho lodo con su saliva y le había dado la vista era sábado.