Cuando David se enteró, envió mensajeros a su encuentro, pues se sentían muy avergonzados, para decirles: —Quedaos en Jericó hasta que os crezca la barba y entonces regresáis.
2 Samuel 10:4 - La Palabra (versión española) Entonces Janún apresó a los servidores de David, les afeitó la mitad de la barba, les cortó los vestidos hasta las nalgas y luego los expulsó. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces Hanún tomó los siervos de David, les rapó la mitad de la barba, les cortó los vestidos por la mitad hasta las nalgas, y los despidió. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Hanún tomó presos a los embajadores de David, les afeitó la mitad de la barba, les cortó los mantos a la altura de las nalgas y los envió avergonzados de regreso a David. Biblia Católica (Latinoamericana) Amún tomó entonces a los servidores de David, les rasuró la mitad de su barba, les cortó la ropa a la altura de las nalgas y los mandó de vuelta. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Hanún tomó a los siervos de David, les rasuró la mitad de la barba, les cortó sus vestiduras hasta la mitad de las nalgas,° y los despidió. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces Janún se apoderó de los servidores de David, les rasuró la mitad de la barba, les cortó los vestidos por la mitad hasta la altura de las nalgas y luego los despachó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Hanún tomó a los siervos de David, y les rapó la mitad de la barba, y les cortó las vestiduras por la mitad hasta las nalgas, y los despidió. |
Cuando David se enteró, envió mensajeros a su encuentro, pues se sentían muy avergonzados, para decirles: —Quedaos en Jericó hasta que os crezca la barba y entonces regresáis.
Ha subido la gente de Dibón a las alturas sagradas a llorar. En Nebo y en Madabá Moab se queja llorosa: con las cabezas rapadas, con las barbas afeitadas.
así conducirá el rey de Asiria a los deportados de Egipto y a los prisioneros de Cus, lo mismo a jóvenes que a ancianos, desnudos y descalzos, mostrando sus vergüenzas.
llegaron ochenta hombres de Siquén, de Siló y de Samaría, con la barba rapada, con la ropa desgarrada y con incisiones en el cuerpo. Llevaban consigo ofrendas e incienso para ofrecerlos en el Templo del Señor.