Con él va Onésimo, vuestro fiel y querido hermano. Os informará de todo cuanto aquí llevamos a cabo.
Filemón 1:10 - Biblia Martin Nieto te pido un favor para Onésimo, mi hijo querido, al que he engendrado a la fe en mi prisión. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 te ruego por mi hijo Onésimo,, a quien engendré en mis prisiones, Biblia Nueva Traducción Viviente Te suplico que le muestres bondad a mi hijo Onésimo. Me convertí en su padre en la fe mientras yo estaba aquí, en la cárcel. Biblia Católica (Latinoamericana) y la petición es para mi hijo Onésimo, a quien transmití la vida mientras estaba preso. La Biblia Textual 3a Edicion te ruego por mi hijo Onésimo,° a quien engendré en las prisiones, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Te suplico, pues, por este hijo mío, a quien engendré entre las cadenas, Onésimo, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Te ruego por mi hijo Onésimo, a quien engendré en mis prisiones, |
Con él va Onésimo, vuestro fiel y querido hermano. Os informará de todo cuanto aquí llevamos a cabo.
Porque aunque tuvierais diez mil pedagogos que os hablen de Cristo, no tendríais muchos padres, pues por medio del evangelio yo os he engendrado en Cristo Jesús.
a Timoteo, verdadero hijo en la fe. Te deseo la gracia, la misericordia y la paz de Dios Padre y de Jesucristo, nuestro Señor.
Hijos míos, sufro por vosotros como si os estuviera de nuevo dando a luz hasta que Cristo sea formado en vosotros.
a Tito, mi verdadero hijo en nuestra fe común, te deseo la gracia y la paz de Dios Padre y de Cristo Jesús, nuestro Salvador.
El rey dio a Joab, a Abisay y a Itay la orden siguiente: 'Respetad, por consideración a mí, al joven Absalón'. Y todo el pueblo supo que el rey había dado esta orden sobre Absalón a todos los jefes.
Uno de entre la gente le respondió: 'Maestro, te he traído a mi hijo, que tiene un espíritu mudo;
Hermanos, os ruego, por la misericordia de Dios, que ofrezcáis vuestros cuerpos como sacrificio vivo, consagrado, agradable a Dios; éste es el culto que debéis ofrecer.
No os escribo esto para avergonzaros, sino para amonestaros como a hijos míos muy queridos.
En otro tiempo fue inútil para ti, pero ahora es bien útil para ti y para mí.
Yo querría retenerlo a mi lado, para que me ayudase en tu lugar en mi prisión por el evangelio;