La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




2 Samuel 13:25 - Biblia Martin Nieto

El rey respondió: 'No, hijo mío, no iremos todos, por no serte gravosos'. Absalón insistió; pero él no quiso ir, y lo bendijo.

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y respondió el rey a Absalón: No, hijo mío, no vamos todos, para que no te seamos gravosos. Y aunque porfió con él, no quiso ir, mas le bendijo.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

El rey contestó: —No, hijo mío. Si fuéramos todos, seríamos mucha carga para ti. Entonces Absalón insistió, pero aun así el rey dijo que no iría, aunque le dio su bendición.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Pero el rey respondió a Absalón: 'No, hijo mío, no podemos ir todos, pues sería demasiado gasto para ti'. Absalón siguió insistiendo ante el rey, quien no quiso ir y se contentó con bendecirlo.

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Pero el rey dijo a Absalón: No, hijo mío, no iremos todos para no serte carga pesada. Y aunque le insistió, él no quiso ir, pero lo bendijo.

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero el rey le respondió: '¡No, hijo mío! No debemos ir todos para no serte gravosos'. Y aunque él insistió, el rey no quiso ir, y le dio la bendición.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y respondió el rey a Absalón: No, hijo mío, no vamos todos, para que no te seamos carga. Y aunque porfió con él, no quiso ir, mas lo bendijo.

Ver Capítulo
Otras versiones



2 Samuel 13:25
9 Referencias Cruzadas  

Absalón se presentó al rey y le dijo: 'Mira, tu siervo está haciendo el esquileo. Que el rey y sus servidores se dignen venir a la casa de tu siervo'.


Absalón dijo: 'Permite, al menos, que venga con nosotros mi hermano Amnón'. El rey respondió: '¿Por qué ha de ir contigo?'.


Joab se postró rostro en tierra, y bendijo al rey, diciendo: 'Hoy sé que cuento con tu favor, oh rey, mi señor, pues has cumplido el deseo de tu siervo'.


El amo le dijo: Sal por los caminos y cercados, y obliga a la gente a entrar para que se llene la casa.


pero ellos le insistieron, diciendo: 'Quédate con nosotros, porque es tarde y ya ha declinado el día'. Y entró para quedarse con ellos.


Después de haber sido bautizada con toda su familia, nos suplicó: 'Si consideráis que soy fiel al Señor, venid y quedaos en mi casa'. Y nos obligó a ello.


Booz de Belén llegó y saludó a los segadores: 'El Señor esté con vosotros'. Ellos le respondieron: 'El Señor te bendiga'.