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1 Samuel 26:9 - Biblia Martin Nieto

David le contestó: '¡No lo mates! Porque ¿quién puso su mano sobre el ungido del Señor y quedó sin castigo?'.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y David respondió a Abisai: No le mates; porque ¿quién extenderá su mano contra el ungido de Jehová, y será inocente?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

—¡No! —dijo David—. No lo mates. Pues ¿quién quedará inocente después de atacar al ungido del Señor?

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Pero David respondió a Abisaí: '¡No lo hieras! ¿Quién podría poner su mano en el ungido de Yavé y quedar sin castigo?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Pero David respondió a Abisai: No lo mates, porque ¿quién extenderá su mano contra el ungido de YHVH y quedará impune?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero David respondió a Abisay: 'No lo mates; pues ¿quién que haya puesto su mano sobre el ungido de Yahveh puede permanecer impune?'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y David respondió a Abisai: No le mates; porque ¿quién extenderá su mano contra el ungido de Jehová, y será inocente?

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Otras versiones



1 Samuel 26:9
11 Referencias Cruzadas  

Y David le preguntó: '¿Cómo te has atrevido a extender tu mano para matar al ungido del Señor?'.


David le dijo: '¡Que tu sangre caiga sobre tu cabeza!, porque tu boca ha dado testimonio contra ti, diciendo: Yo he matado al ungido del Señor'.


Abisay, hijo de Sarvia, dijo: '¿Es que no va a morir Semeí, que maldijo al ungido del Señor?'.


'Guardaos de tocar a mis ungidos, no hagáis mal alguno a mis profetas'.


mi boca no ha faltado como hacen los otros, he guardado siempre tus mandatos,


Al maestro de coro. Según 'No destruyas'. Poema de David, cuando huyendo de Saúl se escondió en la cueva


Señor, Dios mío, si algo de esto hice: si en mis manos existe la injusticia,


Entonces Samuel tomó la redoma del aceite, la derramó sobre su cabeza, le besó y dijo: '¿No es el Señor quien te ha ungido como jefe de su pueblo, Israel? Tú regirás al pueblo del Señor y lo librarás de los enemigos que le rodean. Ésta es la señal de que el Señor te ha ungido como jefe de su heredad:


Aquí me tenéis; acusadme ante el Señor y ante su ungido si he quitado a alguien un buey o he robado a alguien un asno, si he oprimido o perjudicado a alguien o me he dejado sobornar. Acusadme, y yo os responderé'.


Abisay dijo a David: 'Hoy ha puesto Dios a tu enemigo en tus manos. Permíteme que le clave en la tierra con su propia lanza de un solo golpe; no tendré que darle otro'.