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Juan 4:53 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011

El padre entonces cayó en cuenta de que en aquella hora fue que Yahoshúa le dijo: “Tu hijo vive”. Y creyó él con toda su familia.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

El padre entonces entendió que aquella era la hora en que Jesús le había dicho: Tu hijo vive; y creyó él con toda su casa.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces el padre se dio cuenta de que la sanidad había ocurrido en el mismo instante en que Jesús le había dicho: «Tu hijo vivirá». Y tanto él como todos los de su casa creyeron en Jesús.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

El padre comprobó que a esa misma hora Jesús le había dicho: 'Tu hijo está vivo. Y creyó él y toda su familia.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces el padre entendió que aquella era la hora en que Jesús le había dicho: ¡Tu hijo vive! Y creyó él y toda su casa.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Comprobó entonces el padre que aquélla era precisamente la hora en que Jesús le había dicho: 'Tu hijo vive'. Y creyó él y toda su familia.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Entonces el padre entendió que aquella hora era cuando Jesús le dijo: Tu hijo vive; y creyó él, y toda su casa.

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Otras versiones



Juan 4:53
12 Referencias Cruzadas  

Él dio una orden y los sanó, los libró de los hoyos.


Porque él habló, y todo se hizo; él mandó, y apareció.


Entonces Yahoshúa le dijo al centurión: “Ve, y como creíste te suceda”. Y su criado quedó sano en aquella hora.


Yahoshúa le dijo: “Hoy ha venido la salvación a esta casa, por cuanto él también es hijo de Avraham.


Mientras iba bajando, sus siervos salieron a recibirlo diciendo que su hijo vivía.


Entonces él les preguntó la hora en que comenzó a mejorarse, y le dijeron: “Ayer, a la hora séptima se le quitó la fiebre”.


Él te hablará palabras por las cuales te salvarás, tú y toda tu casa’.


Cuando ella y su familia se sumergieron, nos rogó diciendo: “Ya que ustedes han juzgado que soy fiel a Yahweh, vengan y quédense en mi casa”. Y nos obligó a hacerlo.


Los hizo entrar en su casa, les puso la mesa y se regocijó de que con toda su casa había creído en Elohim.


Crispo, el principal de la sinagoga, creyó en el Maestro con toda su casa. Y muchos de los corintios que oían, creían y recibían la inmersión.


Pues para ustedes es la promesa y para sus hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos llame Yahweh nuestro Elohim”.