Porque mi pueblo ha hecho una maldad doble: Me han abandonado a mí, la Fuente de aguas vivas, y se han cavado cisternas, cisternas rotas que no pueden ni retener agua.
Juan 4:11 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011 La mujer le dijo: “Maestro, no tienes con qué sacar, y el pozo es hondo. ¿De dónde, entonces, obtienes esa agua viva? Más versionesBiblia Reina Valera 1960 La mujer le dijo: Señor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo. ¿De dónde, pues, tienes el agua viva? Biblia Nueva Traducción Viviente —Pero señor, usted no tiene ni una soga ni un balde —le dijo ella—, y este pozo es muy profundo. ¿De dónde va a sacar esa agua viva? Biblia Católica (Latinoamericana) Ella le dijo: 'Señor, no tienes con qué sacar agua y el pozo es profundo. ¿Dónde vas a conseguir esa agua viva?' La Biblia Textual 3a Edicion Le dice: Señor, ni vasija tienes, y el pozo es hondo. ¿De dónde pues, tienes el agua viva? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ella le contesta: 'Señor, ni siquiera tienes cubo, y el pozo es profundo. ¿De dónde, pues, vas a sacar tú ese agua viva? Biblia Reina Valera Gómez (2023) La mujer le dijo: Señor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo. ¿De dónde, pues, tienes el agua viva? |
Porque mi pueblo ha hecho una maldad doble: Me han abandonado a mí, la Fuente de aguas vivas, y se han cavado cisternas, cisternas rotas que no pueden ni retener agua.
Nakdimón le preguntó: “¿Cómo puede nacer un hombre si ya es viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer?”
Pero cualquiera que beba del agua que yo le daré, nunca más tendrá sed, sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.
En el último día, el día grande de la Fiesta, Yahoshúa se puso de pie y alzó la voz diciendo: “Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba.
Pero Shimón Kefá le dijo: “De ninguna manera, Maestro, porque nunca he comido nada contaminado ni inmundo”.
Pero el hombre natural no acepta las cosas que son del espíritu de Elohim, porque para él son locura; y no las puede comprender, porque hay que discernirlas espiritualmente.
Me dijo también: “¡Está hecho! Yo soy la Álef y la Tau, el principio y el fin. Al que tenga sed, yo le daré gratuitamente de la fuente de agua de vida.
Después me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal, que fluye del trono de Elohim y del Cordero.
El espíritu y la esposa dicen: “¡Ven!” El que oye diga: “¡Ven!” El que tiene sed, venga. El que quiera, tome del agua de vida gratuitamente.
porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará y los guiará a fuentes de agua viva, y Yahweh enjugará toda lágrima de los ojos de ellos.