Cuando le informaron eso a Dawid, mandó que fueran a encontrarlos, porque los hombres estaban sumamente avergonzados. Y el rey mandó que les dijeran: “Quédense en Yerikó hasta que les vuelva a crecer la barba; entonces podrán volver”.
2 Samuel 10:4 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011 Entonces Janún agarró a los servidores de Dawid, le recortó un lado de la barba y les cortó la mitad de sus vestidos hasta las nalgas, y los despidió. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces Hanún tomó los siervos de David, les rapó la mitad de la barba, les cortó los vestidos por la mitad hasta las nalgas, y los despidió. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Hanún tomó presos a los embajadores de David, les afeitó la mitad de la barba, les cortó los mantos a la altura de las nalgas y los envió avergonzados de regreso a David. Biblia Católica (Latinoamericana) Amún tomó entonces a los servidores de David, les rasuró la mitad de su barba, les cortó la ropa a la altura de las nalgas y los mandó de vuelta. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Hanún tomó a los siervos de David, les rasuró la mitad de la barba, les cortó sus vestiduras hasta la mitad de las nalgas,° y los despidió. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces Janún se apoderó de los servidores de David, les rasuró la mitad de la barba, les cortó los vestidos por la mitad hasta la altura de las nalgas y luego los despachó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Hanún tomó a los siervos de David, y les rapó la mitad de la barba, y les cortó las vestiduras por la mitad hasta las nalgas, y los despidió. |
Cuando le informaron eso a Dawid, mandó que fueran a encontrarlos, porque los hombres estaban sumamente avergonzados. Y el rey mandó que les dijeran: “Quédense en Yerikó hasta que les vuelva a crecer la barba; entonces podrán volver”.
Fue al templo a llorar, Divón [fue] a los altares exteriores. Por Nevó y por Medeba está gimiendo Moav; en toda cabeza hay calvicie, y toda barba está afeitada.
así conducirá el rey de Ashur a los cautivos de Mitsráyim y a los desterrados de Kush, jóvenes y viejos, desnudos y descalzos, con las nalgas descubiertas –¡para vergüenza de Mitsráyim!
ochenta hombres llegaron de Shekhem, de Shiloh y de Shomrón: con sus barbas rapadas, sus ropas desgarradas y sus cuerpos arañados, trayendo ofrendas vegetales e incienso para presentarlos en la Casa de Yahweh.
Ustedes no deben redondear los bordes de su cabellera, ni destruir los bordes de su barba;