Proverbios 10:17 - La Biblia Textual 3a Edicion El que acepta la instrucción va en la senda de la vida, Pero quien desecha la reprensión, yerra. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Camino a la vida es guardar la instrucción; Pero quien desecha la reprensión, yerra. Biblia Nueva Traducción Viviente Los que aceptan la disciplina van por el camino que lleva a la vida, pero los que no hacen caso a la corrección se descarriarán. Biblia Católica (Latinoamericana) Respetar las advertencias es caminar a la vida, no hacer caso de la corrección es perder su camino. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Camino de vida es guardar la instrucción; quien descuida la reprensión se extravía. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Camino a la vida es guardar la instrucción; mas el que rechaza la reprensión, yerra. Biblia Traducción en Lenguaje Actual El que acepta la corrección tendrá una larga vida, pero quien no oye consejos no llegará muy lejos. |
Y sucedió que mientras le hablaba, él le respondió: ¿Acaso te hemos puesto por consejero real? ¡Detente, no sea que te maten!° Entonces el profeta desistió, pero agregó: Yo sé que ’Elohim ha decidido destruirte, porque has hecho esto y no atiendes a mi consejo.
El que ama la corrección ama el conocimiento, Pero el que aborrece la reprensión es necio.
La reconvención molesta al que abandona el camino, El que aborrece la corrección morirá.
Quien rechaza la corrección menosprecia su alma, Quien escucha la amonestación adquiere cordura.
El hombre que, reprendido, endurece la cerviz, Será quebrantado de repente, y no habrá para él medicina.
Es árbol de vida a los que echan mano de ella, Y los que la retienen son bienaventurados.
Aférrate a la corrección, no la abandones, Guárdala, porque ella es tu vida.
Y él me enseñaba y me decía: Retenga tu corazón mis palabras, Guarda mis mandamientos, y vivirás.
Entonces dirás: ¿Por qué aborrecí la corrección, Y mi corazón menospreció la reprimenda?
Porque el mandamiento es lámpara Y la enseñanza luz, Y camino de vida la reprensión que corrige.
No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Ha-’Elohim se enoje a causa de tus palabras y destruya la obra de tus manos?
Pero Él respondió: Antes bien, bienaventurados los que oyen la palabra de Dios y la obedecen.°
Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra,° mucho menos nosotros, si volvemos la espalda al que nos habla desde los cielos;
Por lo cual debemos dar más solícita atención a las cosas que fueron oídas, no sea que las dejemos escurrir.°
Alzó pues sus ojos, y viendo al viajero en la plaza de la ciudad, dijo el anciano: ¿A dónde vas y de dónde vienes?