Cuando Yo quería sanar a Israel, se descubrió la iniquidad de Efraín Y las maldades° de Samaria. Porque obran con engaño: El ladrón se mete por dentro, y la pandilla despoja por afuera.
Oseas 6:9 - La Biblia Textual 3a Edicion Como salteadores al acecho de un hombre, Así bandas de sacerdotes asesinan por el camino a Siquem, Cometiendo execrable maldad. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y como ladrones que esperan a algún hombre, así una compañía de sacerdotes mata en el camino hacia Siquem; así cometieron abominación. Biblia Nueva Traducción Viviente Los sacerdotes forman bandas de asaltantes que esperan para emboscar a sus víctimas. Asesinan a los viajeros en el camino a Siquem y cometen toda clase de pecados. Biblia Católica (Latinoamericana) Como una banda de salteadores, los sacerdotes se juntan para asaltar a los que pasan por el camino de Siquem: lo que hacen es una vergüenza. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Como una emboscada de bandidos, así es la horda de los sacerdotes: asesinan en el camino de Siquén realmente es infame su conducta. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y como ladrones que acechan a un hombre, así una cuadrilla de sacerdotes, en consentimiento asesina en el camino; porque cometen vileza. Biblia Traducción en Lenguaje Actual En el camino que lleva al santuario de Siquem, los sacerdotes parecen ladrones: se esconden para asaltar y matar a todos los que pasan por allí. |
Cuando Yo quería sanar a Israel, se descubrió la iniquidad de Efraín Y las maldades° de Samaria. Porque obran con engaño: El ladrón se mete por dentro, y la pandilla despoja por afuera.
¡Oíd esto, sacerdotes! ¡Atended, oh casa de Israel! ¡Prestad oído, oh casa real! A vosotros afecta esta sentencia, Porque fuisteis lazo° en Mizpa, Red tendida° en el Tabor,
Entonces los principales sacerdotes y los fariseos reunieron al Sanedrín y decían: ¿Qué haremos? porque este hombre hace muchas señales.
Dos días después era la pascua° y los ázimos.° Y los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo prenderlo por engaño para hacer que lo mataran.
Sus príncipes en medio de ella son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos,° que no dejan hueso para la mañana.
Escuchadme príncipes de Jacob, caudillos de la casa de Israel: Vosotros que aborrecéis la justicia, y pervertís toda forma de equidad,
Sus príncipes en medio de ella son como lobos que arrebatan la presa, derramando sangre y destruyendo almas, a fin de obtener ganancias deshonestas.
En ti hay hombres que calumnian para derramar sangre, en ti van a comer a los lugares altos, y en ti se cometen perversidades.
Partimos entonces del río Ahava el doce del mes primero° para ir a Jerusalem, y la mano de nuestro Dios estaba sobre nosotros, y Él nos libró de mano del enemigo y de los salteadores del camino.
Entonces Jeroboam reedificó Siquem, en la región montañosa de Efraín, y habitó en ella; y de allí fue y reedificó Penuel.
Y cuando ellos lo oyeron, alzaron unánimes la voz a Dios,° y dijeron: Soberano, Tú eres el que hiciste el cielo y la tierra y el mar, y todo lo que en ellos hay;°
Hay conjura de sus profetas dentro de ella, como león rugiente que arrebata presa. Devoraron almas, arrebataron riquezas y cosas preciosas, y multiplicaron dentro de ella el número de sus viudas.
Así haré que cese tu lujuria y tus prostituciones traídas de Egipto, de modo que no alces más tus ojos a ellos ni te acuerdes más de Egipto.
Descubriré su infamia ante sus amantes, Y no habrá quien la libre de mi mano.
Se propagan° el perjurio y la mentira, El asesinato y el robo, El adulterio y el libertinaje, Y un charco de sangre toca al otro.°
Y atravesó Abram aquella tierra hasta el lugar de Siquem, hasta el encinar de Moré (y el cananeo estaba entonces en aquella tierra).
Desapareció el piadoso de la tierra, Y no hay más hombres rectos. Todos acechan para derramar sangre; Cada cual caza a su prójimo con una red.