De estas cosas que contempláis, vendrán días en que no quedará piedra sobre piedra que no sea° destruida.
Marcos 13:2 - La Biblia Textual 3a Edicion Y Jesús le dijo: ¿Ves estos grandes edificios? De ningún modo quedará aquí° piedra sobre piedra que no sea totalmente derribada. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Jesús, respondiendo, le dijo: ¿Ves estos grandes edificios? No quedará piedra sobre piedra, que no sea derribada. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús respondió: —Sí, mira estos grandes edificios, pero serán demolidos por completo. ¡No quedará ni una sola piedra sobre otra! Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús le respondió: '¿Ves esas grandiosas construcciones? Pues no quedará de ellas piedra sobre piedra. Todo será destruido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y Jesús le contestó: '¿Ves esas grandes construcciones? Pues no quedará piedra sobre piedra que no sea demolida'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jesús, respondiendo, le dijo: ¿Ves estos grandes edificios? No quedará piedra sobre piedra que no sea derribada. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Jesús le respondió: —¿Ves estos grandes edificios? Pues de ellos no va a quedar en pie ni una pared. Todo será destruido. |
De estas cosas que contempláis, vendrán días en que no quedará piedra sobre piedra que no sea° destruida.
Tomando entonces la palabra,° Él les dijo: ¿Veis todas estas cosas? De cierto os digo: De ningún modo quedará aquí piedra sobre piedra que no sea° totalmente derribada.°
Pues por vuestra culpa Sión será arada como un campo, Jerusalem se convertirá en un montón de ruinas, Y el Monte de la Casa en un cerro de maleza.
Miqueas de Moreset profetizó en los días de Ezequías rey de Judá, y habló a todo el pueblo de Judá, diciendo: Así dice YHVH Sebaot: Sión será arada como un campo, y Jerusalem se convertirá en un montón de ruinas, y el monte de la Casa en un cerro boscoso.
pero el atrio del santuario déjalo fuera° y no lo midas, porque ha sido entregado a los gentiles, y ellos hollarán la ciudad santa° durante cuarenta y dos meses.
Porque lo hemos oído diciendo que este Jesús, el nazareno, destruirá este lugar, y cambiará las costumbres que nos transmitió Moisés.
Después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no por sí. Y el pueblo de un príncipe que ha de venir destruirá la ciudad y el Santuario, pero su fin será como una inundación, y hasta el fin de la guerra han sido decretados asolamientos.