Yo reprendo y disciplino a todos los que amo,° sé pues fervoroso, y arrepiéntete.
Lucas 9:55 - La Biblia Textual 3a Edicion Pero volviéndose,° los reprendió.° Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Jesús se volvió a ellos y los reprendió. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Jesús se volvió y los reprendió. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Jesús, volviéndose hacia ellos, los reprendió. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces volviéndose Él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; Biblia Traducción en Lenguaje Actual Pero Jesús se volvió hacia ellos y los reprendió. |
Yo reprendo y disciplino a todos los que amo,° sé pues fervoroso, y arrepiéntete.
no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino bendiciendo, pues para esto fuisteis llamados, para que heredarais bendición.
Pero él le respondió: Como suelen hablar las insensatas has hablado tú. Si recibimos de ’Elohim el bien, ¿no hemos de aceptar también el mal? En todo esto no pecó Job con sus labios.
Pero he aquí, uno° de los que estaban con Jesús, extendió la mano y sacó su espada, e hiriendo al siervo del sumo sacerdote, le cortó la oreja.
Velad y orad, para que no entréis en tentación; en verdad, el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil.
Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos serán escandalizados a causa tuya, yo nunca seré escandalizado.
Entonces Él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Apártate de mi vista, Satanás! Me eres tropiezo, pues no piensas lo de Dios sino lo de los hombres.
Engañoso es el corazón más que todas las cosas, Incurable,° ¿quién lo conocerá?
No reprendas al escarnecedor, no sea que te aborrezca, Corrige al sabio, y te amará.
David entonces dijo: ¿Qué tengo yo que ver con vosotros, hijos de Sarvia, para que os pongáis hoy por adversarios míos? ¿Acaso ha de morir hombre alguno° hoy en Israel? ¿Acaso no acabo de saber que hoy mismo soy hecho rey sobre Israel?
De la misma boca sale bendición y maldición. No conviene que esto sea así, hermanos míos.
Viendo esto los discípulos Jacobo y Juan, dijeron: Señor, ¿quieres que digamos que descienda fuego del cielo° y los consuma?°