Porque el juicio será sin misericordia para el que no hizo misericordia, pero la misericordia se gloría contra el juicio.°
Jueces 4:16 - La Biblia Textual 3a Edicion Pero Barac persiguió los carros y al ejército hasta Haroset-goim, y todo el ejército de Sísara cayó a filo de espada hasta no quedar ni uno. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Mas Barac siguió los carros y el ejército hasta Haroset-goim, y todo el ejército de Sísara cayó a filo de espada, hasta no quedar ni uno. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Barac persiguió a los carros y al ejército enemigo hasta Haroset-goim, y mató a todos los guerreros de Sísara. Ni uno solo quedó con vida. Biblia Católica (Latinoamericana) Barac salió en persecución de los carros y del ejército hasta Haroset-ha-Goyim, y todo el ejército de Sísera cayó bajo el filo de la espada; nadie escapó. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Barac siguió en persecución de los carros y del ejército hasta Jaróset Hagoin y todo el ejército de Sísara cayó a filo de espada: no quedó ni uno. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas Barac siguió los carros y el ejército hasta Haroset de los Gentiles, y todo el ejército de Sísara cayó a filo de espada hasta no quedar ni uno. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Barac, mientras tanto, persiguió a los soldados y a los carros hasta Haróset-goím. Aquel día murieron todos los soldados de Sísara. Ni uno solo quedó con vida. |
Porque el juicio será sin misericordia para el que no hizo misericordia, pero la misericordia se gloría contra el juicio.°
Porque todos los que sin ley pecaron, sin ley también perecerán;° y todos los que en la ley pecaron, por medio de la ley serán juzgados
Que sacó a batalla° carros y caballos; Tropas con sus valientes, ¡Juntos se acuestan, para no levantarse! ¡Se apagan como se apaga el pabilo!
¡Desaparezcan de la tierra los pecadores, Y los impíos dejen de ser! ¡Bendice alma mía a YHVH! ¡Alabad a YH!
Y YHVH los entregó en mano de Israel, el cual los hirió y los persiguió hasta Sidón- rabah, hasta Misrefot-maim y hasta el llano de Mizpa hacia el oriente; y los atacaron hasta no dejarles sobreviviente.
Las aguas retornaron y cubrieron los carros, los jinetes y todo el ejército de Faraón que había entrado tras ellos en el mar. No quedó ni uno de ellos.
Y YHVH los entregó en mano de Yabín, rey de Canaán, que reinaba en Hazor, el comandante de cuyo ejército era Sísara, que moraba en Haroset-goim.
Sísara, pues, había huido a pie hasta la tienda de Jael, mujer de Heber ceneo, porque había paz entre Yabín rey de Hazor y la casa de Heber ceneo.
Y YHVH los aterrorizó ante Israel, el cual los hirió con gran estrago en Gabaón, persiguiéndolos por el camino que sube a Bet-horón, y los hirió hasta Azeca y Maceda.