Así que, nosotros los fuertes debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.
Juan 21:15 - La Biblia Textual 3a Edicion Cuando pues hubieron comido, Jesús le dice a Simón Pedro: Simón, hijo° de Juan, ¿me amas° más que éstos? Le dice: Sí, Señor, Tú sabes que te quiero.° Le dice: Apacienta mis corderos. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que estos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos. Biblia Nueva Traducción Viviente Después del desayuno, Jesús le preguntó a Simón Pedro: —Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos? —Sí, Señor —contestó Pedro—, tú sabes que te quiero. —Entonces, alimenta a mis corderos —le dijo Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando terminaron de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: 'Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?' Contestó: 'Sí, Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: 'Apacienta mis corderos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando terminaron de almorzar, dice Jesús a Simón Pedro: 'Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?'. Le responde: 'Sí Señor; tú sabes que te quiero'. Él le contesta: 'Apacienta mis corderos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que estos? Le respondió: Sí Señor, tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Cuando terminaron de desayunar, Jesús le preguntó a Pedro: —Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos? Él le respondió: —Sí, Señor. Tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: —Entonces cuida de mis seguidores, pues son como corderos. |
Así que, nosotros los fuertes debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.
Como pastor apacentará su grey, Recogerá a los corderitos en sus brazos, Los llevará en su regazo, Y sustentará a las recién paridas.
a quien amáis sin haberlo visto, en quien aun no viéndolo, pero creyendo, os alegráis con gozo inefable y glorioso;
La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesús, el Mesías, con amor inalterable.°
Tened cuidado de vosotros mismos y de todo el rebaño en que el Espíritu Santo os puso por obispos para apacentar la iglesia de Dios,° que adquirió mediante su propia sangre.
Todo el que cree que Jesús es el Mesías, es nacido° de Dios; y todo el que ama al que engendró, ama al que ha sido engendrado por Él.
porque el Padre mismo os ama, pues vosotros me habéis amado y habéis creído que Yo salí de Dios.
y os daré pastores conforme a mi corazón, que os pastoreen con ciencia y entendimiento.
Y levantaré sobre ellas un pastor, y él las apacentará: a mi siervo David, él las apacentará y será su pastor.
Porque erais como ovejas descarriadas,° mas ahora fuisteis devueltos al Pastor y Guardián de vuestras almas.
Y no hay criatura escondida en su presencia; antes bien, todas las cosas están desnudas y expuestas a los ojos de Aquél a quien tenemos que presentar° cuenta.
Pero Yo rogué por ti que no desfallezca tu fe. Y tú, cuando hayas vuelto, fortalece a tus hermanos.
Y el Dios de paz, el cual, en virtud de la sangre del pacto eterno, levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas,
Respondió Jesús y le dijo: Bienaventurado eres Simón bar Jonás,° porque no te lo reveló carne ni sangre,° sino mi Padre que está en los cielos.
Y pondré sobre ellas pastores que las pastoreen, y no temerán más, ni se turbarán, y niguna faltará, dice YHVH.
y a sus hijos mataré con mala muerte,° y todas las iglesias conocerán que Yo soy el que escudriña riñones y corazones,° y os daré a cada uno de vosotros conforme a vuestras obras.°
desead como niños° recién nacidos la leche espiritual no adulterada,° para que por ella crezcáis en salvación,°
Porque en Jesús el Mesías ni la circuncisión vale° algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor.
Jesús les dice: Venid, comed. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Tú quién eres? sabiendo que era° el Señor.
Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba, dice a Pedro: ¡Es el Señor! Cuando Simón Pedro oyó: Es el Señor, se ciñó la ropa (porque estaba desnudo),° y se echó al mar.
Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños, porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos.°
Para que ya no seamos niños fluctuantes, zarandeados por las olas, llevados a la deriva por todo viento de doctrina, por la astucia de hombres que emplean con maestría las artimañas del error;
Entonces, por tu conocimiento, se echa a perder° el débil, el hermano por quien el Mesías murió.
Jesús les dijo: Si Dios fuera vuestro padre, ciertamente me amaríais, porque Yo procedo y he venido de Dios. No he venido de mí mismo, sino del que me envió.
No temáis manada pequeña,° porque vuestro Padre se complació en daros el reino.°
Pero le dijo: Mi señor sabe que los niños son delicados y que tengo ovejas y vacas que están criando, y si las fatigan, en un día podría morir todo el rebaño.
El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí;
Te ruego, oh YHVH, te ruego que recuerdes que he andado delante de ti con verdad y con un corazón íntegro, y que he hecho lo bueno ante tus ojos. Y Ezequías lloraba amargamente.
Le dice Pedro: Señor, ¿por qué no puedo seguirte ahora? Mi vida pondré por ti.
Lo llevó a Jesús. Mirándolo fijamente, Jesús dijo: Tú eres Simón, el hijo de Juan,° tú serás llamado Cefas (que significa Pedro).°
Pedro le dice: Aunque tenga que morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo.
Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos serán escandalizados a causa tuya, yo nunca seré escandalizado.
Yo sé que después de mi partida, entrarán entre vosotros lobos feroces que no perdonan al rebaño,
Entonces me dijo: Éstos son los fogones donde los servidores de la Casa cocerán los sacrificios del pueblo.