Pero Tú, Adonay, eres un Dios compasivo y misericordioso, Lento para la ira y grande en misericordia y verdad.
Joel 2:13 - La Biblia Textual 3a Edicion ¡Rasgad vuestro corazón, Y no vuestros vestidos! ¡Volveos a YHVH vuestro Dios, Que es clemente y compasivo, Lento para la ira y grande en misericordia, Y se conduele de la desgracia! Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. Biblia Nueva Traducción Viviente No se desgarren la ropa en su dolor sino desgarren sus corazones». Regresen al Señor su Dios, porque él es misericordioso y compasivo, lento para enojarse y lleno de amor inagotable. Está deseoso de desistir y no de castigar. Biblia Católica (Latinoamericana) Rasguen su corazón, y no sus vestidos, y vuelvan a Yavé su Dios, porque él es bondadoso y compasivo; le cuesta enojarse, y grande es su misericordia; envía la desgracia, pero luego perdona. Biblia Serafín de Ausejo 1975 rasgad vuestros corazones y no vuestros vestidos, y convertíos a Yahveh, vuestro Dios, porque él es clemente y misericordioso, tardo a la cólera, rico en piedad, y se arrepiente del daño que causa. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Rasgad vuestro corazón, y no vuestras vestiduras; y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque Él es misericordioso y clemente, lento para la ira, y grande en misericordia, y se arrepiente de castigar el mal. Biblia Traducción en Lenguaje Actual ¡Arrepiéntanse y vuelvan a mí, pero háganlo de todo corazón, y no solo de palabra! Yo soy tierno y bondadoso, y no me enojo fácilmente; yo los amo mucho y estoy dispuesto a perdonarlos”. |
Pero Tú, Adonay, eres un Dios compasivo y misericordioso, Lento para la ira y grande en misericordia y verdad.
q Cercano está YHVH a los quebrantados de corazón, Y salva a los contritos de espíritu.
Porque así dice el Alto y Excelso, Morador eterno, cuyo nombre es Santo: Yo habito en la altura sagrada, Pero estoy con los de espíritu humilde y quebrantado, Para reanimar al de espíritu humilde y vivificar el corazón quebrantado.
¿Qué Dios hay como Tú, que carga° con el pecado, Y pasa por alto° la transgresión del remanente de su heredad? No retuvo para siempre su indignación, Porque se complace en la compasión.
Porque Tú Adonay, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.
Misericordioso y clemente es YHVH, Lento para la ira y grande en misericordia.
Y oró a YHVH diciendo: ¡Oh YHVH! ¿No era esto lo que decía yo estando aún en mi tierra? Por eso huí a Tarsis, porque sabía que Tú eres clemente y misericordioso, lento para la ira y grande en misericordia, que desistes de dar castigo.
Mi mano hizo todas estas cosas, Y así todas ellas llegaron a existir, dice YHVH. Pero Yo miraré al pobre y humilde de espíritu, Y que tiembla ante mi palabra.
Entonces David asiendo sus vestidos, los rasgó, y lo mismo hicieron todos los hombres que estaban con él.
¿O menosprecias la riqueza de su benignidad, de su tolerancia° y de su longanimidad, ignorando que la benignidad de Dios te guía al arrepentimiento?
El sacrificio grato a ’Elohim° es el espíritu quebrantado. Al corazón contrito y humillado no despreciarás Tú, oh ’Elohim.
pero ya que tu corazón está tierno y humillado delante de YHVH al escuchar lo que he pronunciado contra este lugar y contra sus habitantes, que llegarían a ser desolación y maldición, y has rasgado tus vestidos, y has llorado delante de mí, también Yo he escuchado, dice YHVH.
Se acordaba de su pacto con ellos, Y se compadecía° conforme a la multitud de sus misericordias.
Entonces Job se levantó, y rasgó su manto y se rapó la cabeza, y cayendo en tierra se postró,
YHVH, lento para la ira y grande en misericordia, que carga con la iniquidad y la transgresión, pero de ningún modo tiene por inocente al culpable° y visita la iniquidad de los padres sobre los hijos, sobre terceros y cuartos.°
Rehusaron escuchar, y no tuvieron presente las maravillas que hacías entre ellos, sino que endurecieron su cerviz, y en su rebelión° designaron a un caudillo que los volviera a su esclavitud. Pero Tú eres un Dios presto al perdón, clemente y compasivo, lento para la ira, y grande en misericordia, y no los abandonaste,
porque el ejercicio corporal para poco aprovecha, pero la piedad es provechosa para todo, teniendo promesa para esta vida y para la que viene.
YHVH es lento para la ira, grande en paciencia, Pero no tendrá por inocente al culpable. b YHVH camina en el torbellino y en la tormenta, Y las nubes son el polvo de sus pasos.
y le dijo YHVH: ¡Pasa en medio de la ciudad, en medio de Jerusalem, y señala con una cruz° las frentes de los hombres que gimen y se angustian a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella!
Cuando el rey escuchó las palabras de la mujer, mientras pasaba por el muro, rasgó sus vestidos; y el pueblo observó, y, he aquí, vestía de saco° sobre su cuerpo.
Y sucedió que al leer la carta, el rey de Israel rasgó sus vestidos, y dijo: ¿Acaso soy ’Elohim para matar o para hacer vivir, para que éste me envíe a un hombre a curarlo de su lepra? Considerad ahora, y ved cómo busca ocasión contra mí.
Y sucedió que cuando Acab oyó estas palabras, rasgó sus vestiduras, puso cilicio sobre su cuerpo, y ayunó y se acostó con el cilicio, y anduvo abatido.
Entonces Jacob rasgó sus ropas, puso tela de saco en sus lomos e hizo duelo por su hijo durante muchos días.
Cuando Rubén volvió a la cisterna, he aquí que José no estaba en la cisterna. Entonces rasgó sus vestidos,°
¿Es tal el ayuno que Yo escogí, Que de día aflija el hombre su alma, Que mueva la cabeza como un junco, Y se acueste sobre saco y ceniza? ¿Llamaréis a eso ayuno, Día agradable a YHVH?
Y aconteció que cuando el rey escuchó las palabras del Rollo de la Ley, rasgó sus vestidos.
sucedió que vinieron ciertos hombres de Siquem, de Silo y de Samaria, unos ochenta hombres, con sus barbas raídas, sus vestidos rasgados y sus carnes sajadas, que traían consigo ofrendas e incienso para presentarlos a la Casa de YHVH.
Si permanecéis quietos en esta tierra, Yo os edificaré, y no os destruiré. Os plantaré, y no os arrancaré, porque me pesa todo el mal que os he hecho.
entonces escucha Tú desde los cielos, y perdona el pecado de tus siervos y de tu pueblo Israel. Sí, enséñales el buen camino por el que deben andar y dales lluvia sobre tu tierra, la cual diste a tu pueblo por heredad.
Quizá su oración llegue ante la presencia de YHVH, y cada cual se vuelva de su mal camino, porque grande es la ira y la indignación que YHVH siente contra este pueblo.
¿Quién sabe si desistirá ’Elohim y cambiará de parecer, y se apartará del furor de su ira, y no pereceremos?