Luego se sentaron a comer pan, y alzando sus ojos vieron una caravana de ismaelitas que venía de Galaad,° llevando en sus camellos especias, bálsamo y mirra para hacerlos bajar a Egipto.
Génesis 43:11 - La Biblia Textual 3a Edicion Respondió su padre Israel: Si tiene que ser así, hacedlo. Tomad de lo mejor de la tierra en vuestras bolsas y llevad obsequios a aquel hombre, un poco de bálsamo, y un poco de miel, especias y mirra, nueces y almendras. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces Israel su padre les respondió: Pues que así es, hacedlo; tomad de lo mejor de la tierra en vuestros sacos, y llevad a aquel varón un presente, un poco de bálsamo, un poco de miel, aromas y mirra, nueces y almendras. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces su padre Jacob finalmente les dijo: —Si no queda otro remedio, entonces al menos hagan esto: carguen sus costales con los mejores productos de esta tierra —bálsamo, miel, resinas aromáticas, pistachos y almendras—; llévenselos al hombre como regalo. Biblia Católica (Latinoamericana) Israel, su padre, les dijo: 'Ya que no queda más remedio, hagan lo siguiente. Echen en sus bolsas algo de los productos del país: tragacanto, miel, goma, láudano, pistacho y almendras, y llévenselo como regalo a ese hombre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Les dijo Israel, su padre: 'Si no hay más remedio, haced lo siguiente: Meted algunos de los productos del país en vuestros sacos, y llevad al hombre aquel como presente un poco de resina y un poco de miel, tragacanto y láudano, pistachos y almendras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Israel su padre les respondió: Pues que así es, hacedlo; tomad de lo mejor de la tierra en vuestros sacos, y llevad a aquel varón un presente, un poco de bálsamo, y un poco de miel, aromas y mirra, nueces y almendras. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Ante esto, su padre no tuvo más remedio que aceptar: —Pues si no hay otra solución, llévense a su hermano y vuelvan ya a donde está ese hombre. Pero hagan lo siguiente: Llenen sus sacos con los mejores productos de nuestro país para regalárselos. Llévenle bálsamo, un poco de miel, algunas especias, y mirra, pistachos y almendras. Lleven también una doble cantidad de dinero, pues tienen que entregar el que les devolvieron en sus sacos. Tal vez lo pusieron allí por error. |
Luego se sentaron a comer pan, y alzando sus ojos vieron una caravana de ismaelitas que venía de Galaad,° llevando en sus camellos especias, bálsamo y mirra para hacerlos bajar a Egipto.
¿No hay bálsamo en Galaad? ¿No hay médicos allí? ¿Por qué, entonces, no se cierran las heridas de la hija de mi pueblo?
También Judá y la tierra de Israel traficaban contigo, dándote por tus mercaderías el trigo de Minit y de Panag, y la miel, el aceite y la resina.
Los regalos abren paso al hombre, Y lo conducen ante la presencia de los grandes.
Saúl respondió a su criado: Pero si vamos, ¿qué llevaremos al varón? Porque el pan de nuestras alforjas se ha acabado. No tenemos presente que llevar al varón de Dios. ¿Qué tenemos?
Y como no se dejaba persuadir,° desistimos, diciendo: ¡Hágase la voluntad del Señor!
Los hijos de Dedán traficaban contigo, y muchas islas se hallaban bajo la dependencia de tu comercio, y te traían como tributo colmillos de marfil y maderas de ébano.
Oh amado mío, apresúrate,° Y sé como la gacela o el cervatillo, sobre los montes de los aromas.
Nardo y azafrán, cálamo aromático y canela, Con todos los árboles de incienso, Mirra y áloes, con los mejores bálsamos y aromas.
¡Cuán perfecto es tu amor, Hermana mía y esposa mía! ¡Cuánto mejores que el vino son tus caricias! ¡Cuánto mejor la fragancia de tus ungüentos que todos los perfumes!
Un regalo en secreto aplaca la ira, Y un soborno bajo el manto, el gran furor.
Anda falto de juicio quien da presto la mano, Saliendo fiador de su vecino.
Haced votos a YHVH vuestro Dios, y cumplidlos; Todos los que lo rodean traigan presentes al que debe ser temido.
Que los reyes de Tarsis y las islas le paguen tributo, Que los reyes de Sabá y de Seba le ofrezcan sus dones.
Ve y reúne a todos los judíos que están en Susa, y ayunad por mí, y no comáis ni bebáis durante tres días, ni de noche ni de día. Yo también ayunaré igualmente con mis doncellas, y entonces acudiré al rey aunque no sea conforme a la ley,° ¡y si he de perecer, que perezca!°
En aquel tiempo Berodac-baladán, hijo de Baladán, rey de Babilonia, envió una carta y un presente a Ezequías, porque había escuchado que Ezequías estaba enfermo.
Y Acaz tomó la plata y el oro que halló en la Casa de YHVH y en los tesoros de la casa real, y lo envió como soborno al rey de Asiria.
Y el rey dijo a Hazael: Toma en tu mano un presente, y ve al encuentro del varón de Dios, y consulta a YHVH por medio de él, y pregunta: ¿Sanaré de esta enfermedad?
¡Haya alianza entre tú y yo, como entre mi padre y tu padre! He aquí, te envío un obsequio de plata y oro. ¡Ve y rompe tu alianza con Baasa rey de Israel, para que se aparte de mí!
Y año tras año, todos ellos le llevaban su presente: objetos de plata, objetos de oro, vestiduras, armas, perfumes, caballos y mulos.
aparte del de los mercaderes, y el de los negocios de los comerciantes, y el de todos los reyes de Arabia, y el de los gobernadores del país.
°Y Salomón gobernaba sobre todos los reinos, desde el Río° hasta la tierra de los filisteos y el límite con Egipto. Y traían tributo, y sirvieron a Salomón todos los días de su vida.
Y ahora, este presente que tu sierva ha traído a mi señor, sea dado a los mozos que acompañan a mi señor.
Con el raudal de los frutos del sol, Y con el raudal de la germinación de las lunas,
Y que ’El-Shadday° os conceda gran misericordia ante aquel hombre, y os suelte a vuestro otro hermano, y a Benjamín. Y si he de quedar privado de hijos, ¡privado de hijos quede!
Pero Jacob dijo: ¡No, por favor! Si he hallado ahora gracia delante de tus ojos, toma el presente de mi mano, pues he visto tu rostro benévolo, y es como ver el rostro de ’Elohim.
Pero a vosotros os he dicho: Vosotros poseeréis la tierra de ellos, y Yo os la daré para que la poseáis, tierra que fluye leche y miel. ¡Yo soy YHVH vuestro Dios, que os he apartado de entre los pueblos!
Los hombres entonces, tomando los obsequios, el doble de plata en su mano, y a Benjamín, se levantaron y bajaron a Egipto para presentarse ante José.
Y ellos prepararon el presente para la llegada de José al mediodía, pues oyeron que allí habrían de comer los alimentos.
Cuando José llegó a la casa, ellos le presentaron dentro de la casa los regalos que tenían en sus manos, y se postraron a tierra ante él.
Los mercaderes de Sabá y de Raama traficaban contigo; venían a tus mercados con el más apreciado bálsamo, y toda clase de piedras preciosas y oro daban por tus mercaderías.
Descenderé, pues, para librarlo de mano de los egipcios y para hacerlo subir de ese país a una tierra buena y ancha, a una tierra que fluye leche y miel,° al lugar del cananeo, del heteo, del amorreo, del ferezeo, del heveo y del jebuseo.