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Éxodo 15:9 - La Biblia Textual 3a Edicion

El enemigo dijo: Perseguiré, apresaré, Repartiré despojos, Mi alma se saciará de ellos, Desenvainaré mi espada, Los destruirá mi mano.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

El enemigo dijo: Perseguiré, apresaré, repartiré despojos; Mi alma se saciará de ellos; Sacaré mi espada, los destruirá mi mano.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»El enemigo se jactaba diciendo: “Los perseguiré y los alcanzaré. Los despojaré y los consumiré. Sacaré mi espada; mi mano poderosa los destruirá”.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Dijo el enemigo: 'Los perseguiré y los alcanzaré, los tendré a merced, llevaré sus despojos; sacaré mi espada y mi mano los matará.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Se dijo el enemigo: 'Yo los perseguiré, les daré alcance, repartiré despojos, mi espíritu en ellos saciaré desenvainaré mi espada, mi mano los exterminará'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

El enemigo dijo: Perseguiré, prenderé, repartiré despojos; mi alma se saciará de ellos; sacaré mi espada, los destruirá mi mano.

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Biblia Traducción en Lenguaje Actual

»Nuestros enemigos pensaron: “¡Vamos a perseguirlos! ¡Vamos a darles alcance! ¡Vamos a acabar con ellos! ¡Les quitaremos todo lo que tengan, y nos lo repartiremos!”

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Otras versiones



Éxodo 15:9
15 Referencias Cruzadas  

¿Ya agarran el botín y lo reparten? Un útero° o dos por cada guerrero, Paños de colores para Sísara, Recamados y bordados para cuellos de cautivas. ¡Gran botín!


Y fue anunciado al rey de Egipto que el pueblo había huido. Y fue trastocado el corazón de Faraón y el de sus siervos contra el pueblo, y dijeron: ¿Qué es esto que hemos hecho? ¿Por qué hemos dejado ir a Israel de nuestra servidumbre?


pero si llega uno más fuerte que él y lo vence, le quita su armadura en la cual confiaba, y reparte sus despojos.


Por tanto, Yo le daré parte con los grandes, Y con los fuertes repartirá despojos, Por cuanto derramó su vida hasta la muerte, Y fue contado entre los pecadores, Habiendo cargado el pecado de multitudes y orado por los transgresores.


Con sus propios dardos traspasas al caudillo, Y sus tropas se dispersan en torbellino, Cuando triunfantes iban a devorar una víctima a escondidas.


Benjamín, lobo depredador, En la mañana devorará la presa, Y por la tarde repartirá despojos.


¿Qué dios de esas tierras ha podido librar sus territorios de mi mano? ¿Y YHVH va a librar a Jerusalem de mi mano?


Y Ben-hadad envió a decirle: ¡Así me hagan los dioses y aun me añadan, que el polvo de Samaria no bastará para llenar las manos de todo el pueblo que me sigue!


Entonces Jezabel envió un mensajero a Elías, diciendo: ¡Así me hagan los dioses, y aun me añadan, si mañana a esta hora no he hecho tu vida como la vida de uno de ellos!


Y David consultó a YHVH, preguntándole: ¿Perseguiré a esta banda? ¿Los podré alcanzar? Y Él le respondió: Persíguelos porque de seguro la alcanzarás, y sin duda los rescatarás.


Perseguiré a mis enemigos y los destruiré, Y no me volveré atrás hasta acabarlos.


Más vale ser humilde con los pobres, Que repartir despojos con los soberbios.


Y allí apodaron al rey de Egipto: ¡Faraón, rugido inoportuno!°