Pero después que David hizo contar al pueblo, le remordió el corazón. Así que David dijo a YHVH: He pecado gravemente al haber hecho esto. Ahora, oh YHVH, te ruego que perdones la iniquidad de tu siervo, porque he obrado neciamente.
Efesios 5:15 - La Biblia Textual 3a Edicion Mirad pues con diligencia° cómo os comportáis, no como necios, sino como sabios; Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, Biblia Nueva Traducción Viviente Así que tengan cuidado de cómo viven. No vivan como necios sino como sabios. Biblia Católica (Latinoamericana) Examinen, pues, con mucho esmero su conducta. No anden como tontos, sino como hombres responsables. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mirad, pues, con cuidado cómo os portáis; que no sea como necios, sino como sabios, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mirad, pues, que andéis con diligencia; no como necios, sino como sabios, Biblia Traducción en Lenguaje Actual Tengan cuidado de cómo se comportan. Vivan como gente que piensa lo que hace, y no como tontos. |
Pero después que David hizo contar al pueblo, le remordió el corazón. Así que David dijo a YHVH: He pecado gravemente al haber hecho esto. Ahora, oh YHVH, te ruego que perdones la iniquidad de tu siervo, porque he obrado neciamente.
Pero él le respondió: Como suelen hablar las insensatas has hablado tú. Si recibimos de ’Elohim el bien, ¿no hemos de aceptar también el mal? En todo esto no pecó Job con sus labios.
Guardaos en todo lo que os he dicho. No invocaréis ni se oirán en tu boca el nombre de dioses extraños.°
Discernir el camino es sabiduría del sagaz, Pero la necedad de los necios es puro engaño.
La necedad divierte al falto de entendimiento, Pero el hombre inteligente endereza su andar.
He aquí, Yo os envío como a ovejas en medio de lobos.° Sed pues prudentes° como serpientes, y sencillos como palomas.
Viendo Pilato que nada se lograba,° sino que más bien se estaba formando un alboroto, tomó agua y se lavó° las manos delante del gentío, diciendo: ¡Inocente soy de la sangre de éste!° ¡Allá vosotros!
diciendo: Pequé entregando sangre inocente. Pero ellos dijeron: ¿Y a nosotros qué? ¡Allá tú!
Entonces Jesús le dice: Mira, no lo digas a nadie, solamente ve y muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés,° para testimonio a ellos.
Entonces Él les dijo: ¡Oh° insensatos y tardos de corazón para creer en todo lo que hablaron los profetas!
Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero sed maduros en el modo de pensar.
¡Oh gálatas insensatos, ante cuyos ojos Jesús el Mesías fue exhibido° crucificado! ¿Quién os fascinó?°
¿Tan insensatos sois? ¿Habiendo comenzado en el Espíritu, ahora os perfeccionáis en la carne?°
y andad en amor, como el Mesías también nos amó, y se entregó por nosotros en ofrenda y sacrificio a Dios para olor fragante.°
Por lo demás, vosotros también, cada uno en particular, ame a su propia° esposa de la misma manera que a sí mismo, y que la esposa respete° al esposo.
Solamente que os comportéis° de una manera digna del evangelio del Mesías, para que, ya sea que vaya y os vea, ya sea que estando ausente, oiga acerca de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes, combatiendo juntos por la fe del evangelio;
Por esto también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir° que seáis llenos del pleno° conocimiento de su voluntad, en toda sabiduría y discernimiento espiritual;
Mirad que ninguno devuelva a otro mal por mal, sino procurad siempre lo bueno los unos para con los otros, y para con todos.
pues los que quieren ser ricos caen en tentación y trampa y en muchas codicias insensatas y dañinas, las cuales hunden a los hombres en destrucción y perdición;
Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra,° mucho menos nosotros, si volvemos la espalda al que nos habla desde los cielos;
¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en la mansedumbre de la sabiduría.
Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad° para un amor fraternal sincero, amaos intensamente de corazón los unos a los otros,
Y yo caí ante sus pies para adorarlo, pero me dijo: ¡Mira, no!, que soy consiervo tuyo y de tus hermanos, de los que retienen el testimonio de Jesús.° ¡Adora a Dios! porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.