Pero ahora, desechad también vosotros todas estas cosas: Ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje obsceno de vuestra boca.
Efesios 4:31 - La Biblia Textual 3a Edicion Sea quitada de vosotros toda amargura y enojo, e ira, y grito airado y maledicencia, junto con toda maldad. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Biblia Nueva Traducción Viviente Líbrense de toda amargura, furia, enojo, palabras ásperas, calumnias y toda clase de mala conducta. Biblia Católica (Latinoamericana) Arranquen de raíz de entre ustedes disgustos, arrebatos, enojos, gritos, ofensas y toda clase de maldad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Desaparezca de entre vosotros toda amargura, animosidad, ira, gritos, insultos y toda clase de maldad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Toda amargura, y enojo, e ira, y gritería, y maledicencia, y toda malicia, sea quitada de entre vosotros; Biblia Traducción en Lenguaje Actual Dejen de estar tristes y enojados. No griten ni insulten a los demás. Dejen de hacer el mal. |
Pero ahora, desechad también vosotros todas estas cosas: Ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje obsceno de vuestra boca.
No te apresures en tu alma a enojarte, Porque la ira reposa en el seno de los necios.
Desechando pues toda malicia, y todo engaño, fingimientos y envidias, y todas las maledicencias,
Sabed,° mis amados hermanos: Todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para la ira;
Pero si tenéis celos amargos y rivalidad en vuestros corazones, no os jactéis y mintáis contra la verdad.
No como Caín, que era del maligno y asesinó a su hermano;° ¿y por qué razón lo asesinó? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.
Destruiré al que calumnia en secreto a su prójimo, No soportaré al altanero de ojos y vanidoso de corazón.
Hermanos, no habléis mal unos de otros. El que habla mal del hermano, o juzga a su hermano, habla mal de la ley y juzga la ley; y si juzgas la ley, ya no eres hacedor de la ley, sino juez.
Porque es necesario que el obispo° sea irreprensible, como administrador de Dios: No arrogante, ni iracundo, ni adicto al vino, ni pendenciero, ni codicioso de ganancias deshonestas;
De igual manera las mujeres° sean serias, no calumniadoras, sobrias, fieles en todo.
Porque temo que al ir, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado por vosotros como no queréis; no sea que haya contienda,° envidia,° animosidades, ambiciones egoístas, difamaciones, chismes, engreimientos, desórdenes;°
Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero sed maduros en el modo de pensar.
El hombre irascible levanta contiendas, Y el furioso abunda en transgresiones.
Los labios rectos aplacan el odio, Pero el que esparce calumnia es un necio.
y aprenden también a estar ociosas, yendo de casa en casa; y no sólo ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando las cosas que no deben.
idolatría, hechicería, hostilidades, contienda,° celos, enojos, rivalidades, disensiones, herejías,°
Así que sigamos celebrando la solemnidad, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con ázimos° de sinceridad y de verdad.
Como el viento del norte ahuyenta° la lluvia, Así el rostro airado, la lengua detractora.
Las palabras del chismoso son manjares, Que penetran hasta el fondo de sus entrañas.
Testigo falso que habla mentiras, Y el que enciende rencillas entre sus hermanos.
El hombre de mala° lengua no se afianzará en la tierra, Y el mal perseguirá al varón violento.
Te sientas,° y hablas contra tu hermano, Y difamas al hijo de tu propia madre.
El que no calumnia con su lengua, Ni hace daño a su prójimo, Ni hace agravio a su conciudadano.
Además, ha calumniado a tu siervo delante de mi señor el rey; pero mi señor el rey es como un ángel° de Dios, así que haz lo que sea bueno ante tus ojos;
Sus hermanos, al ver que su padre lo prefería entre todos ellos,° lo aborrecían y no le podían hablar pacíficamente.
Y aborreció Esaú a Jacob por la bendición con que lo había bendecido su padre, y dijo Esaú en su corazón: Se acercan los días del luto de mi padre, entonces podré matar a Jacob mi hermano.
Y Caín trataba° a su hermano Abel, pero sucedió que cuando estaban ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel y lo asesinó.°
Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: ¡Ahora han venido° la salvación y el poder y el reino de nuestro Dios, y la soberanía de su Ungido, porque fue arrojado el acusador de nuestros hermanos,° el que los acusaba día y noche delante de nuestro Dios!
Todo el que aborrece a su hermano es homicida, y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.°
Asimismo a las ancianas, que sean reverentes en la conducta; no adictas a chismes maliciosos ni esclavizadas por exceso° de vino, maestras de lo bueno,
Pero evita las controversias necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas,
Así que, toda la ciudad se alborotó, y se agolpó el pueblo; y prendiendo a Pablo, lo arrastraron fuera del templo, y cerraron inmediatamente las puertas.
Todos son rebeldes obstinados, Y propalan calumnias; Todos son bronce y hierro de mala calidad.
Si un sabio contiende con un necio, Se enoje éste o se ría, no habrá sosiego.
Y respondiendo los hombres de Israel, dijeron a los hombres de Judá: ¡Diez partes tenemos en el rey, y más derecho sobre David que vosotros! ¿Por qué, pues, nos habéis menospreciado? ¿No dimos nuestra palabra° primero para hacer volver a nuestro rey? Sin embargo, la palabra de los hombres de Judá prevaleció sobre la palabra de los hombres de Israel.°
Y Absalón no habló con Amnón ni mal ni bien, pero Absalón aborreció a Amnón porque había ultrajado a su hermana Tamar.
Pero cuando Rubén lo oyó, intentándolo librar de mano de ellos, dijo: ¡No le quitemos la vida!
sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, enemigos de lo bueno,
¡Cuídese cada uno de su prójimo! No tenga confianza en ningún hermano, Porque todo hermano suplanta, Y todo prójimo anda calumniando.
h Deja la ira, desecha el enojo, No te enardezcas en manera alguna a hacer el mal.
En cuanto a la antigua manera de vivir, despojaos del viejo hombre,° que está corrompido por los deseos engañosos,
Por tanto, desechando la mentira, cada uno hable verdad con su prójimo,° porque somos miembros los unos de los otros.