porque Dios puso en sus corazones hacer lo que Él se ha propuesto, y hacer que se pongan de acuerdo, y den su reino a la bestia, hasta que se hayan cumplido las palabras de Dios.
Daniel 3:3 - La Biblia Textual 3a Edicion Con lo cual fueron reunidos los sátrapas, prefectos y gobernadores, los jueces, tesoreros, consejeros, magistrados, y todos los altos funcionarios de las provincias, a la consagración de la estatua que el rey Nabucodonosor había hecho levantar, y se presentaron ante la estatua que el rey Nabucodonosor había hecho levantar. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Fueron, pues, reunidos los sátrapas, magistrados, capitanes, oidores, tesoreros, consejeros, jueces, y todos los gobernadores de las provincias, a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado; y estaban en pie delante de la estatua que había levantado el rey Nabucodonosor. Biblia Nueva Traducción Viviente De modo que todas estas autoridades vinieron y se pusieron de pie ante la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado. Biblia Católica (Latinoamericana) Así fue, pues, como los funcionarios, prefectos, gobernadores, consejeros, tesoreros, procuradores, jueces y todos los jefes de provincia se reunieron para la inauguración de la estatua que había hecho levantar el rey Nabucodonosor. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Reuniéronse, pues, los sátrapas, prefectos, gobernadores, consejeros, tesoreros, juristas, jueces y todas las autoridades de la provincia para la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había erigido, y se pusieron ante la estatua alzada por Nabucodonosor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces fueron reunidos los príncipes, los gobernadores y capitanes, los jueces, los tesoreros, los consejeros, los presidentes y todos los gobernadores de las provincias, a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado; y estaban en pie delante de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado. |
porque Dios puso en sus corazones hacer lo que Él se ha propuesto, y hacer que se pongan de acuerdo, y den su reino a la bestia, hasta que se hayan cumplido las palabras de Dios.
Éstos tienen un mismo propósito, y entregan su poder y autoridad a la bestia.
Y el rey Nabucodonosor hizo que se reunieran los sátrapas, prefectos y gobernadores, jueces, tesoreros, consejeros, magistrados, y todos los altos funcionarios de las provincias, para que vinieran a la consagración de la estatua que el rey Nabucodonosor había hecho levantar.
Y los sátrapas, prefectos, gobernadores y consejeros del rey, reunidos allí, vieron cómo el fuego no había tenido poder alguno contra aquellos varones. Ni siquiera sus cabellos estaban chamuscados; sus ropas estaban intactas y no tenían olor a quemado.