Me hallaron los guardas que rondan la ciudad. ¿Habéis visto al que ama mi alma?
Cantares 5:7 - La Biblia Textual 3a Edicion Los guardas que rondan la ciudad me hallaron, Me golpearon y me hirieron. Los guardas de las murallas me despojaron de mi manto. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Me hallaron los guardas que rondan la ciudad; Me golpearon, me hirieron; Me quitaron mi manto de encima los guardas de los muros. Biblia Nueva Traducción Viviente Los guardias nocturnos me encontraron mientras hacían sus rondas. Me golpearon y me lastimaron y me arrancaron el velo, aquellos guardias del muro. Biblia Católica (Latinoamericana) Me encontraron los centinelas
los que andan de ronda por la ciudad,
me golpearon y me hirieron.
Me quitaron mi chal,
los guardias de las murallas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Me encontraron los guardias, los que rondan la ciudad, me golpearon y me hirieron; me quitaron el velo, los que guardan las murallas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Me hallaron los guardas que rondan la ciudad; me golpearon, me hirieron, me quitaron mi manto de encima los guardas de los muros. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Me topé con los guardias, con los que vigilan la ciudad; y ellos me hirieron, me golpearon, ¡y me dejaron desnuda! |
Me hallaron los guardas que rondan la ciudad. ¿Habéis visto al que ama mi alma?
puestos los ojos en Jesús, el Autor y Consumador de la fe; el cual, por el gozo puesto delante de Él, soportó la cruz, y despreciando el oprobio, se ha sentado a la diestra del trono de Dios.
en cuanto al celo, perseguidor de la iglesia;° en cuanto a la justicia que hay en la ley, irreprensible.
Porque éstos son falsos apóstoles, obreros deshonestos, en que se disfrazan de apóstoles del Mesías.
Os echarán de las sinagogas,° y llega la hora cuando cualquiera que os mate,° piense que ofrece servicio a Dios.
Bienaventurados sois cuando los hombres os aborrezcan, cuando os excluyan y os insulten y rechacen vuestro nombre como maligno, por causa del Hijo del Hombre.°
Por eso los he hecho morir con las palabras de mi boca: Los he trozado por medio de los profetas, Y mi sentencia saldrá como la luz.°
¡Oh Jerusalem, sobre tus muros he emplazado centinelas! Nunca se descuidarán, ni de día ni de noche. Los que invocáis a YHVH no os deis descanso;
Coro Salomón tuvo una viña en Baal-hamón. Arrendó la viña a los guardas, Que le traen por su fruto, Cada uno mil siclos° de plata.
Será un favor que el justo me castigue y me reprenda; Pero que el ungüento del impío no perfume mi cabeza, Porque mi oración es de continuo contra su maldad.
Abrí a mi amado, Pero mi amado ya se había ido, Había pasado, Y mi alma salió tras su hablar. Lo busqué, pero no lo hallé, Lo llamé, pero no me respondió.
Os conjuro, oh hijas de Jerusalem, Si halláis a mi amado, ¿Le diréis que desfallezco de amor?