Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra,° mucho menos nosotros, si volvemos la espalda al que nos habla desde los cielos;
2 Reyes 5:11 - La Biblia Textual 3a Edicion Pero Naamán se retiró airado, diciendo: He aquí yo pensaba: Seguramente saldrá a mi encuentro, se detendrá, e invocará el nombre de YHVH su Dios, y agitará su mano frente el lugar,° y curará la lepra. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra. Biblia Nueva Traducción Viviente Naamán se enojó mucho y se fue muy ofendido. «¡Yo creí que el profeta iba a salir a recibirme! —dijo—. Esperaba que él moviera su mano sobre la lepra e invocara el nombre del Señor su Dios ¡y me sanara! Biblia Católica (Latinoamericana) Naamán se enojó y se fue diciendo: 'Yo pensaba que saldría a verme en persona, que invocaría el nombre de Yavé su Dios, que pasaría su mano por la parte enferma y que me libraría de la lepra. ¿No son los ríos de Damasco, el Abna y el Parpar, mejores que todos los de Israel? ¡Me habría bastado con lavarme allí para sanarme!'
Muy enojado dio media vuelta para irse. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Irritóse Naamán y se fue diciendo: 'Yo pensaba: seguramente saldrá, se detendrá, invocará el nombre de Yahveh, su Dios, frotará con su mano la parte enferma y curará a este leproso. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano, y tocará el lugar, y sanará la lepra. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Naamán se enojó y se fue diciendo: «Yo pensé que el profeta saldría a recibirme, y que oraría a su Dios. Creí que pondría su mano sobre mi cuerpo y que así me sanaría de la lepra. |
Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra,° mucho menos nosotros, si volvemos la espalda al que nos habla desde los cielos;
En verdad, en verdad os digo: El que recibe al que Yo envíe, me recibe a mí, y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.°
Porque todo el que se enaltece, será humillado, y el que se humilla, será enaltecido.°
Pero al oír el joven la palabra, se fue entristecido, porque era de los que tienen° muchas posesiones.
Pero ella dijo: Sí, Señor, pero aun los perros comen las migajas que caen de la mesa de sus amos.
Pero el centurión, respondiendo, dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo, pero sólo dilo de palabra, y mi siervo será sanado,
Con la soberbia sólo se provoca contienda, Pero con los bien aconsejados está la sabiduría.
El descarrío de los simples los matará, Y la complacencia de los necios los destruirá.
Devuelve ahora a la mujer de ese hombre, porque es profeta, y él orará por ti, y vivirás. Pero si no la devuelves, sabe que de cierto morirás, tú y todos los tuyos.
Y Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve y lávate en el Jordán siete veces, y tu carne se te restaurará, y serás limpio.
¿Abana y Farfar, ríos de Damasco, no son mejores que todas las aguas de Israel? ¿Acaso no me lavaré en ellos y seré limpio? Y volviéndose, se fue airado.
Y la mujer se alejó de él. Después cerró la puerta tras sí y tras sus hijos; y ellos le acercaban, y ella vertía.