en lo cual también me fatigo, luchando conforme a su potencia, la cual actúa poderosamente en mí.
2 Corintios 8:1 - La Biblia Textual 3a Edicion Ahora bien hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios dada en las iglesias de Macedonia, Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; Biblia Nueva Traducción Viviente Ahora quiero que sepan, amados hermanos, lo que Dios, en su bondad, ha hecho por medio de las iglesias de Macedonia. Biblia Católica (Latinoamericana) Ahora queremos darles a conocer una gracia de Dios con que fueron favorecidas las Iglesias de Macedonia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Queremos que conozcáis, hermanos, la gracia que Dios ha otorgado a las iglesias de Macedonia: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que ha sido dada a las iglesias de Macedonia; Biblia Traducción en Lenguaje Actual Hermanos míos, queremos contarles cómo Dios ha mostrado su amor y su bondad a las iglesias de la región de Macedonia. |
en lo cual también me fatigo, luchando conforme a su potencia, la cual actúa poderosamente en mí.
y ciertamente lo hacéis así para con todos los hermanos en toda Macedonia, pero os rogamos, hermanos, que abundéis más y más,
Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su gracia hacia mí no ha sido en vano;° al contrario, trabajé más que todos ellos, pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.
Y se mostró a Pablo una visión de noche: Cierto° varón macedonio estaba en pie y le rogaba, diciendo: ¡Pasa a Macedonia y ayúdanos!
A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos,° me fue dada esta gracia de proclamar a los gentiles el evangelio de la inescrutable riqueza del Mesías,
pues conozco vuestra disposición, de la que me glorío por vosotros ante los macedonios; porque Acaya se ha preparado desde el año pasado, y vuestro ejemplo estimuló a la mayoría.
Porque Macedonia y Acaya decidieron proveer alguna contribución° para los pobres de los santos que están en Jerusalem;°
Cuando llegó y vio la gracia de Dios, se regocijó, y exhortaba a todos a permanecer fieles al Señor con firmeza de corazón,
Y estando presente con vosotros, cuando tuve necesidad, no fui una carga para nadie, porque los hermanos que fueron de Macedonia° proveyeron lo que me faltaba, y en todo me guardé y me guardaré de seros carga.
Porque el ministerio de este servicio° no sólo suple las necesidades de los santos, sino que también abunda en acciones de gracias a Dios,
no sea que si van conmigo algunos de Macedonia y os hallan desprevenidos, nosotros seamos avergonzados, para no decir vosotros,° por esta confianza.°
Ahora bien, después de muchos° años llegué a mi nación para dar° limosnas y ofrendas,
Acercándose también el° de los dos talentos, dijo: Señor, me entregaste dos talentos. Mira, gané otros dos talentos.°