Ni siquiera me he atrevido a salir a buscarte yo mismo. Pero di tú una palabra y mi asistente quedará curado.
Lucas 7:8 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento) Porque yo también estoy sujeto a la autoridad de mis superiores, y a la vez tengo soldados a mi mando. Si a uno de ellos le digo: 'Vete', va; y si le digo a otro: 'Ven', viene; y si a mi asistente le digo: 'Haz esto', lo hace. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Porque también yo soy hombre puesto bajo autoridad, y tengo soldados bajo mis órdenes; y digo a este: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace. Biblia Nueva Traducción Viviente Lo sé porque estoy bajo la autoridad de mis oficiales superiores y tengo autoridad sobre mis soldados. Solo tengo que decir: “Vayan”, y ellos van, o “vengan”, y ellos vienen. Y si les digo a mis esclavos: “Hagan esto”, lo hacen». Biblia Católica (Latinoamericana) Yo mismo, a pesar de que soy un subalterno, tengo soldados a mis órdenes, y cuando le ordeno a uno: 'Vete', va; y si le digo a otro: 'Ven', viene; y si digo a mi sirviente: 'Haz esto', lo hace. La Biblia Textual 3a Edicion Porque aun yo, siendo hombre bajo autoridad superior, tengo soldados bajo mi mando, y digo a éste: Ve, y va; y a otro: Ven, y viene; y a mi siervo:° Haz esto; y lo hace. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque también yo, aunque no soy más que un subalterno, tengo soldados bajo mis órdenes, y le digo a uno: 'Ve', y va; y a otro: 'Ven', y viene; y a mi criado: 'Haz esto', y lo hace'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque también yo soy hombre puesto bajo autoridad, y tengo soldados bajo mi cargo; y digo a este: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace. |
Ni siquiera me he atrevido a salir a buscarte yo mismo. Pero di tú una palabra y mi asistente quedará curado.
Al oír esto, Jesús quedó admirado de él. Y, volviéndose a la gente que le seguía, dijo: - Os aseguro que ni siquiera en Israel he encontrado una fe tan grande como ésta.
Pablo llamó en seguida a un oficial y le dijo: - Lleva a este muchacho ante el comandante, pues tiene algo que comunicarle.
Seguidamente llamó a dos oficiales y les dio estas instrucciones: - Hay que salir para Cesarea a las nueve de la noche. Tened preparada al efecto una escolta compuesta por doscientos soldados de infantería, setenta de caballería y doscientos lanceros.
De acuerdo con las órdenes recibidas, la escolta tomó a su cargo a Pablo y le condujo de noche hasta Antípatris.
Ordenó luego al oficial encargado de la custodia de Pablo que mantuviera preso a éste, aunque con cierta libertad y sin impedirle ser asistido por sus allegados.
Ahora bien, no existiendo una causa concreta de la que pueda yo informar por escrito al emperador, le he hecho comparecer ante vosotros, y particularmente ante ti, rey Agripa, a fin de que, como resultado de este interrogatorio, pueda yo escribir algo al respecto.
Esclavos, acatad en todo momento con respeto las órdenes de los amos temporales. No en plan adulador o como alguien que se siente vigilado, sino con la nobleza de los que temen al Señor.