Mientras el gobernador estaba sentado en el tribunal, su mujer le envió este recado: - Ese hombre es inocente. No te hagas responsable de lo que le suceda. Esta noche he tenido pesadillas horribles por causa suya.
Lucas 23:4 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento) Pilato dijo a los jefes de los sacerdotes y a todos los presentes: - En este hombre no encuentro ninguna culpa. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y Pilato dijo a los principales sacerdotes, y a la gente: Ningún delito hallo en este hombre. Biblia Nueva Traducción Viviente Pilato se dirigió a los principales sacerdotes y a la multitud y les dijo: —¡No encuentro ningún delito en este hombre! Biblia Católica (Latinoamericana) Pilato se dirigió a los jefes de los sacerdotes y a la multitud. Les dijo: 'Yo no encuentro delito alguno en este hombre. La Biblia Textual 3a Edicion Pilato dijo entonces a los principales sacerdotes y a las multitudes: Ningún delito hallo en este hombre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo luego Pilato a los pontífices y al pueblo: 'Yo no encuentro delito alguno en este hombre'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Pilato dijo a los príncipes de los sacerdotes, y a la gente: Ninguna falta hallo en este hombre. |
Mientras el gobernador estaba sentado en el tribunal, su mujer le envió este recado: - Ese hombre es inocente. No te hagas responsable de lo que le suceda. Esta noche he tenido pesadillas horribles por causa suya.
Pilato preguntó: - Pues ¿cuál es su delito? Pero ellos gritaban más y más: - ¡Crucifícale!
Por tercera vez les dijo: - Pero cuál es su delito? No he descubierto en él nada que merezca la muerte; así que voy a castigarle y luego le soltar
Pilato repuso: - ¡La verdad! ¿Qué es la verdad? Una vez oída la declaración de Jesús, Pilato salió de nuevo y dijo a los judíos: - Yo no encuentro delito alguno en este hombre.
Sin embargo, me consta que no ha cometido ningún crimen por el cual merezca la muerte. Pero como ha apelado a Su Majestad imperial, he decidido enviárselo a él.
El Dios de abraham, de Isaac y de Jacob, el Dios de nuestros antepasados , ha colmado de honor a Jesús, su siervo, a quien, por cierto, vosotros mismos entregasteis a las autoridades y rechazasteis ante Pilato cuando ya éste había decidido ponerle en libertad.
Un sumo sacerdote así era el que nosotros necesitábamos: santo, inocente , incontaminado, a cubierto de toda promiscuidad con los pecadores y encumbrado hasta lo más alto de los cielos.
sino con la sangre de Cristo; una sangre preciosa, como cordero sin mancha y sin tacha.
También Cristo murió por los pecados, una vez por todas, el inocente por los culpables, para conducirnos a Dios. Como mortal, sufrió la muerte; como espiritual fue devuelto a la vida.