Pero, en fin, para que nadie se ofenda, acércate al lago y echa el anzuelo al agua. En la boca del primer pez que pesques encontrarás la moneda precisa. Paga con ella el impuesto por ti y por mí.
Lucas 23:2 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento) Comenzaron la acusación diciendo: - Hemos comprobado que éste anda alterando el orden público. Se opone a que se pague el tributo al emperador y, además, afirma que es el Mesías, o sea un rey. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y comenzaron a acusarle, diciendo: A este hemos hallado que pervierte a la nación, y que prohíbe dar tributo a César, diciendo que él mismo es el Cristo, un rey. Biblia Nueva Traducción Viviente Comenzaron a presentar su caso: «Este hombre ha estado llevando al pueblo por mal camino al decirles que no paguen los impuestos al gobierno romano y al afirmar que él es el Mesías, un rey». Biblia Católica (Latinoamericana) Allí empezaron con sus acusaciones: 'Hemos comprobado que este hombre es un agitador. Se opone a que se paguen los impuestos al César y pretende ser el rey enviado por Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y comenzaron a acusarlo, diciendo: Hemos hallado° que éste pervierte° nuestra nación, y no sólo prohíbe dar tributo a César, sino que dice que él mismo es el Mesías rey. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y comenzaron a acusarlo: 'Hemos encontrado a este hombre, que pervierte a nuestro pueblo prohibiendo pagar los tributos al César y diciendo que él es Cristo rey'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y comenzaron a acusarle, diciendo: Hemos hallado que Éste pervierte la nación; y que prohíbe dar tributo a César, diciendo que Él mismo es Cristo, un Rey. |
Pero, en fin, para que nadie se ofenda, acércate al lago y echa el anzuelo al agua. En la boca del primer pez que pesques encontrarás la moneda precisa. Paga con ella el impuesto por ti y por mí.
Le contestaron: - Del emperador. Entonces él dijo: - Pues dad al emperador lo que es del emperador, y a Dios lo que es de Dios.
Jesús compareció ante el gobernador, el cual le preguntó: - ¿Eres tú el rey de los judíos? Jesús le contestó: - Tú lo dices.
Entonces Jesús les dijo: - Pues dad al emperador lo que es del emperador , y a Dios lo que es de Dios. Con esta respuesta los dejó estupefactos.
Pilato le preguntó: - ¿Eres tú el rey de los judíos? Jesús le contestó: - Tú lo dices.
y les dijo: - Me habéis traído a este hombre diciendo que altera el orden público; pero yo le he interrogado delante de vosotros y no le he encontrado culpable de nada.
Pero ellos insistieron aún más: - Con sus enseñanzas está alborotando al pueblo en toda Judea. Empezó en Galilea y ahora continúa aquí.
Por eso tuvo que salir Pilato para preguntarles: - ¿De qué acusáis a este hombre?
Ellos le contestaron: - Si no fuese un criminal, no te lo habríamos entregado.
Desde ese momento, Pilato intentaba por todos los medios poner a Jesús en libertad. Pero los judíos le gritaban: - Si pones en libertad a ese hombre, no eres amigo del emperador. El que pretende ser rey es enemigo del emperador.
Hemos llegado a descubrir que este hombre es peor que la peste. Se dedica a fomentar la discordia entre los judíos de todo el imperio, además de ser el cabecilla de la secta de los nazarenos.
Dad a cada uno lo que le corresponde, lo mismo si se trata de impuestos que de contribuciones, de respeto que de honores.