Jesús preguntó al padre: - ¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto? Le contestó: - Desde niño.
Juan 5:5 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento) Había entre ellos un hombre que llevaba enfermo treinta y ocho años. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. Biblia Nueva Traducción Viviente Uno de ellos era un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. Biblia Católica (Latinoamericana) Había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. La Biblia Textual 3a Edicion Y estaba allí cierto hombre que llevaba treinta y ocho años en su enfermedad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Había un hombre allí que llevaba treinta y ocho años enfermo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y estaba allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. |
Jesús preguntó al padre: - ¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto? Le contestó: - Desde niño.
Pues esta mujer es una descendiente de Abraham, y Satanás la tenía atada desde hace dieciocho años: ¿acaso por ser día festivo no se debía librarla de sus ataduras?
De camino, una mujer que padecía hemorragias desde hacía doce años y que había gastado toda su fortuna en médicos, sin lograr que ninguno la curase,
Poco después, Jesús se encontró con él en el templo y le dijo: - Escúchame: ya que has sido curado, no vuelvas a pecar; podría sucederte algo peor.
porque de cuando en cuando bajaba un ángel del Señor y agitaba el agua. El primero que se metía en el agua después que ocurría esto , quedaba curado de cualquier enfermedad que tuviera .*
Jesús, al verle allí tendido y sabiendo que llevaba tanto tiempo, le preguntó: - ¿Quieres curarte?
Cómo es que ahora ve, no lo sabemos; tampoco sabemos quién le ha dado la vista. Preguntádselo a él; tiene edad suficiente para responder por sí mismo.
Había en Listra un tullido, cojo de nacimiento, que nunca se había valido de sus pies.
se encontraron con un cojo de nacimiento junto a la puerta del templo llamada 'La Hermosa'. Le llevaban cada día, y le ponían allí para que pidiese limosna a las personas que iban al templo.
ya que el milagro de la curación se había realizado en un hombre de más de cuarenta años.
Allí encontró a un hombre llamado Eneas, a quien la parálisis tenía postrado en cama desde hacía ocho años.