Jesús les dijo entonces: - Esta noche va a fallar vuestra fe en mí, porque así lo dicen las Escrituras: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas del rebaño.
Juan 16:32 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento) Pues mirad, se acerca el momento, mejor dicho, ha llegado ya, en que cada uno de vosotros se dispersará por su lado y me dejaréis solo. Aunque yo no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 He aquí la hora viene, y ha venido ya, en que seréis esparcidos cada uno por su lado, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero se acerca el tiempo —de hecho, ya ha llegado— cuando ustedes serán dispersados, cada uno se irá por su lado y me dejarán solo. Sin embargo, no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Biblia Católica (Latinoamericana) Está llegando la hora, y ya ha llegado, en que se dispersarán cada uno por su lado y me dejarán solo. Aunque no estoy solo, pues el Padre está conmigo. La Biblia Textual 3a Edicion He aquí viene una hora, y ha llegado, en que seáis esparcidos cada uno por su lado y me dejéis solo; aunque no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mirad: llega la hora -o mejor: ya ha llegado- en que seréis dispersados cada uno por su lado y me dejaréis solo; aunque no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) He aquí la hora viene, y ya ha venido, en que seréis dispersados cada uno a los suyos, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo. |
Jesús les dijo entonces: - Esta noche va a fallar vuestra fe en mí, porque así lo dicen las Escrituras: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas del rebaño.
Pero todo esto sucede para que se cumpla lo que escribieron los profetas. En aquel momento, todos los discípulos de Jesús le abandonaron y huyeron.
Jesús les dijo: - Vuestra fe va a fallar, porque está escrito: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas.
Jesús les dijo: - Ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser glorificado.
Porque os expulsarán de la sinagoga. Más aún, llegará un momento en que os quitarán la vida, convencidos de que con ello rinden culto a Dios.
Hasta ahora os he hablado en lenguaje figurado; pero llega el momento en que no recurriré más a este lenguaje, sino que os hablaré del Padre en forma clara y directa.
Después dijo al discípulo: - Ahí tienes a tu madre. Y, desde aquel momento, el discípulo la acogió en su casa.
Jesús le dijo: - Créeme, mujer, está llegando el momento en que para dar culto al Padre no tendréis que subir a este monte ni ir a Jerusalén.
Está llegando el momento, mejor dicho, ha llegado ya, en que los hombres que rinden verdadero culto al Padre se lo rindan en espíritu y en verdad. Estos son, en efecto, los adoradores que el Padre quiere.
Os aseguro que está llegando el momento, mejor dicho, ha llegado ya, en que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la oigan volverán a la vida.
No os admiréis de lo que estoy diciendo, porque llegará el momento en que todos los muertos oirán su voz
y, cuando lo hago, mi juicio es válido, porque no estoy yo solo; conmigo está el Padre que me envió.
El que me envió está conmigo y no me ha dejado solo, porque yo hago siempre lo que le agrada.
Tras intercambiar saludos de despedida, subimos a bordo de la nave, y ellos regresaron a sus casas.
Saulo estaba allí, dando su aprobación a la muerte de Esteban. aquel mismo día se desató una violenta persecución contra la iglesia de Jerusalén . Todos los fieles, a excepción de los apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaria.