a que le preguntaran: - ¿Eres tú el que había de venir, o debemos esperar a otro?
Juan 10:24 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento) cuando se le acercaron los judíos, se pusieron a su alrededor y le dijeron: - ¿Hasta cuándo vas a tenernos en vilo? Si eres el Mesías, dínoslo claramente de una vez. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo nos turbarás el alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente. Biblia Nueva Traducción Viviente La gente lo rodeó y le preguntó: —¿Hasta cuándo nos tendrás en suspenso? Si tú eres el Mesías, dínoslo sin rodeos. Biblia Católica (Latinoamericana) cuando los judíos lo rodearon y le dijeron: '¿Hasta cuándo nos vas a tener en suspenso? Si tú eres el Mesías, dínoslo claramente. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces lo rodearon los judíos, y le decían: ¿Hasta cuándo nos turbarás el alma? Dinos claramente si tú eres el Mesías. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Lo rodearon los judíos para preguntarle: '¿Hasta cuándo nos vas a tener en vilo? Si tú eres el Cristo, dínoslo claramente'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo nos has de turbar el alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente. |
a que le preguntaran: - ¿Eres tú el que había de venir, o debemos esperar a otro?
Les habló con toda claridad. Pedro entonces, llevándole aparte, comenzó a reprenderle.
Con todo esto, la gente estaba en expectación, preguntándose si Juan no sería, quizá, el Mesías.
Los judíos de Jerusalén enviaron una comisión de sacerdotes y levitas para preguntar a Juan quién era él. Su testimonio fue tajante y sin reservas: - Yo no soy el Mesías.
Le contestaron: - No queremos apedrearte por ninguna obra buena, sino por la blasfemia que has proferido contra Dios: tú que eres un hombre como los demás, pretendes hacerte pasar por Dios.
Hasta ahora os he hablado en lenguaje figurado; pero llega el momento en que no recurriré más a este lenguaje, sino que os hablaré del Padre en forma clara y directa.
Los judíos le preguntaron entonces: - Pero ¿quién eres tú? Jesús les respondió: - Precisamente es lo que vengo diciéndoos desde el principio.
¿Acaso eres tú más que nuestro padre Abraham? Tanto él como los profetas murieron. ¿Por quién te tienes tú?
Los padres contestaron así por miedo a los judíos, pues éstos habían tomado la decisión de expulsar de la sinagoga a todos los que reconocieran que Jesús era el Mesías.