La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




1 Juan 4:14 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento)

Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado a su Hijo para salvar al mundo.

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Además, hemos visto con nuestros propios ojos y ahora damos testimonio de que el Padre envió a su Hijo para que fuera el Salvador del mundo.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Pero también nosotros hemos visto y declaramos que el Padre envió a su Hijo como Salvador del mundo.

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Y nosotros hemos visto° y damos testimonio de que el Padre ha enviado al Hijo como° Salvador del mundo.

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Y nosotros hemos visto y atestiguamos que el Padre envió a su Hijo como Salvador del mundo.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo para ser el Salvador del mundo.

Ver Capítulo
Otras versiones



1 Juan 4:14
18 Referencias Cruzadas  

Y aquel que es la Palabra se hizo hombre y habitó entre nosotros; y vimos su gloria, la que le corresponde como Hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad.


Al día siguiente, Juan vio a Jesús que se acercaba a él, y dijo: - Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.


Entonces, ¿con qué derecho me acusáis de blasfemia a mí, que he sido elegido por el Padre para ser enviado al mundo, por haber dicho que soy Hijo de Dios?


No seré yo quien condene al que escuche mis palabras y no haga caso de ellas, porque yo no he venido para condenar al mundo, sino para salvarlo.


Te aseguro que nosotros hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto; con todo, vosotros rechazáis nuestro testimonio.


y da testimonio de lo que ha visto y oído; sin embargo, nadie acepta su testimonio.


Porque, cuando habla aquel a quien Dios ha enviado, es Dios mismo quien habla, ya que Dios le ha comunicado plenamente su Espíritu.


decían a la mujer: - Ya no creemos en él por lo que tú nos dijiste, sino porque nosotros mismos le hemos oído, y estamos convencidos de que él es verda- deramente el salvador del mundo.


Estudiáis apasionadamente las Escrituras, pensando encontrar en ellas vida eterna; pues bien, precisamente las Escrituras dan testimonio de mí.


Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo estaba totalmente dedicado al anuncio del mensaje, insistiendo ante los judíos que no había más Mesías que Jesús.


Por medio de Silvano, a quien considera hermano de vuestra total confianza, os he escrito brevemente para animaros y aseguraros que ésta es la verdadera gracia de Dios. ¡Manteneos en ella!


¿Qué dónde radica el amor? No en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que nos alcanzase el perdón de nuestros pecados.


Nosotros aceptamos a los hombres por testigos. Pues bien, Dios es el mejor de los testigos, y su testimonio consiste precisamente en haber declarado en favor de su Hijo.