Porque voy a enviar un diluvio sobre la tierra, para destruir a todos los seres vivientes bajo el cielo. Todo lo que existe en la tierra morirá.
Jueces 5:3 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 »¡Oíd, reyes! ¡Escuchad, gobernantes! Yo cantaré, cantaré al Señor; tocaré música al Señor, el Dios de Israel. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Oíd, reyes; escuchad, oh príncipes; Yo cantaré a Jehová, Cantaré salmos a Jehová, el Dios de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡Escuchen, ustedes reyes! ¡Presten atención, ustedes gobernantes poderosos! Pues cantaré al Señor; tocaré música para el Señor, Dios de Israel. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Escuchen reyes, soberanos presten atención, a Yavé le quiero cantar! ¡Cantaré para Yavé, para el Dios de Israel! La Biblia Textual 3a Edicion ¡Oíd, oh reyes, nobles escuchad Que voy a cantar, a cantar a YHVH, A cantar salmos a YHVH, al Dios de Israel! Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Escuchad, reyes; prestad oído, príncipes! Yo, yo quiero cantar a Yahveh; voy a entonar un himno a Yahveh, Dios de Israel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Oíd, oh reyes; escuchad, oh príncipes: Yo cantaré a Jehová, cantaré alabanzas a Jehová, Dios de Israel. |
Porque voy a enviar un diluvio sobre la tierra, para destruir a todos los seres vivientes bajo el cielo. Todo lo que existe en la tierra morirá.
Entonces Elías añadió: ―Yo soy el único que ha quedado de los profetas del Señor; en cambio, Baal cuenta con cuatrocientos cincuenta profetas.
―Me consume mi amor por ti, Señor Dios Todopoderoso —respondió él—. Los israelitas han rechazado tu pacto, han derribado tus altares, y a tus profetas los han matado a filo de espada. Yo soy el único que ha quedado con vida, ¡y ahora quieren matarme a mí también!
Él respondió: ―Me consume mi amor por ti, Señor Dios Todopoderoso. Los israelitas han rechazado tu pacto, han derribado tus altares, y a tus profetas los han matado a filo de espada. Yo soy el único que ha quedado con vida, ¡y ahora quieren matarme a mí también!
Ahora bien, yo, el rey Artajerjes, les ordeno a todos los tesoreros que están al oeste del río Éufrates que entreguen de inmediato todo cuanto solicite Esdras, sacerdote y maestro versado en la ley del Dios del cielo.
Alabaré al Señor toda mi vida; mientras haya aliento en mí, cantaré salmos a mi Dios.
Me hará prevalecer frente a los enemigos que me rodean; en su templo ofreceré sacrificios de alabanza y cantaré salmos al Señor.
»Además, he designado como su ayudante a Aholiab hijo de Ajisamac, de la tribu de Dan, y he dotado de habilidad a todos los artesanos para que hagan todo lo que te he mandado hacer, es decir:
entonces yo también me pondré definitivamente en contra vuestra. Siete veces os castigaré por vuestros pecados,
Los guerreros de Israel desaparecieron; desaparecieron hasta que yo me levanté. ¡Yo, Débora, me levanté como una madre en Israel!