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Cantares 1:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Tú y tus adornos, amada mía, me recordáis a las yeguas enjaezadas de los carros del faraón.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

A yegua de los carros de Faraón Te he comparado, amiga mía.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Amada mía, tú eres tan cautivante como una yegua entre los sementales del faraón.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Como yegua uncida al carro de Faraón, así eres a mis ojos, amada mía.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Él A mi yegua favorita° entre los carros de Faraón te he comparado, Oh amada mía.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Eres, amada mía, como la yegua de la carroza del Faraón.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

A yegua de los carros de Faraón te he comparado, amada mía.

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Otras versiones



Cantares 1:9
13 Referencias Cruzadas  

También salieron con él carros y jinetes, formando así un cortejo muy grande.


Los caballos de Salomón eran importados de Egipto y de Coa, que era donde los mercaderes de la corte los compraban.


¡Cuán bella eres, amada mía! ¡Cuán bella eres! ¡Tus ojos son dos palomas!


Mi amado me habló y me dijo: «¡Levántate, amada mía; ven conmigo, mujer hermosa!


La higuera ofrece ya sus primeros frutos, y las viñas en ciernes esparcen su fragancia. ¡Levántate, amada mía; ven conmigo, mujer hermosa!»


Como azucena entre las espinas es mi amada entre las mujeres.


¡Cuán bella eres, amada mía! ¡Cuán bella eres! Tus ojos, tras el velo, son dos palomas. Tus cabellos son como los rebaños de cabras que retozan en los montes de Galaad.


Toda tú eres bella, amada mía; no hay en ti defecto alguno.


Yo dormía, pero mi corazón velaba. ¡Y oí una voz! ¡Mi amado estaba a la puerta! «Hermana, amada mía; preciosa paloma mía, ¡déjame entrar! Mi cabeza está empapada de rocío; la humedad de la noche corre por mi pelo».


Tú, amada mía, eres bella como Tirsá, encantadora como Jerusalén, majestuosa como las estrellas del cielo.


¡Ay de los que descienden a Egipto en busca de ayuda, de los que se apoyan en la caballería, de los que confían en la multitud de sus carros de guerra y en la gran fuerza de sus jinetes, pero no tienen en cuenta al Santo de Israel, ni buscan al Señor!