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Juan 18:30 - Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)

Ellos le contestaron: --No lo habríamos traído si no fuera un criminal.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Respondieron y le dijeron: Si este no fuera malhechor, no te lo habríamos entregado.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

—¡No te lo habríamos entregado si no fuera un criminal! —replicaron.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Le contestaron: 'Si éste no fuera un malhechor, no lo habríamos traído ante ti.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Respondieron y le dijeron: Si éste no estuviera haciendo mal,° no te lo habríamos entregado.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Le respondieron: 'Si éste no fuera un malhechor, no te lo habríamos entregado'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Respondieron y le dijeron: Si Éste no fuera malhechor, no te lo habríamos entregado.

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Otras versiones



Juan 18:30
11 Referencias Cruzadas  

'Como pueden ver, ahora vamos a Jerusalén. Y a mí, el fHijo del hombre, me entregarán a los fsacerdotes principales y a los fmaestros de la Ley. Me condenarán a muerte y me entregarán a los extranjeros


Los sacerdotes principales presentaban muchas acusaciones contra Jesús.


Por eso Pilato, el gobernador romano, salió y les dijo: --¿De qué acusan a este hombre?


Pilato les dijo: --Llévenselo y júzguenlo de acuerdo con sus propias leyes. Los jefes judíos respondieron: --Nosotros no tenemos autoridad para enviar a nadie a la muerte.


A partir de ese momento, Pilato buscó la manera de dejar libre a Jesús, pero la gente gritó: --¡Si dejas libre a ese hombre, no eres amigo del emperador romano! ¡Cualquiera que quiera hacerse rey, es enemigo del emperador!


Nuestros antepasados Abraham, Isaac y Jacob adoraron a Dios. Y ese mismo Dios es quien nos ha enviado a Jesús como Mesías, y nos ha mostrado lo maravilloso y poderoso que es Jesús. Pero ustedes lo entregaron a los gobernantes romanos, y aunque Pilato quiso soltarlo, ustedes no se lo permitieron.


Por anunciar esa buena noticia sufro mucho y estoy en la cárcel; me tienen encadenado, como si fuera yo un criminal. Pero el mensaje de Dios no está encadenado.


Si alguno de ustedes sufre, que no sea por ser asesino, ladrón o bandido, ni por meterse en asuntos ajenos.