1 Juan 1:8 - Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento) Si decimos que no hemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no decimos la verdad. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Biblia Nueva Traducción Viviente Si afirmamos que no tenemos pecado, lo único que hacemos es engañarnos a nosotros mismos y no vivimos en la verdad; Biblia Católica (Latinoamericana) Si decimos que no tenemos pecado, nos estamos engañando a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. La Biblia Textual 3a Edicion Si dijéramos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. |
Todos cometemos muchas faltas, pero solo quien es capaz de dominar su lengua, es una persona madura y puede dominarse a sí mismo.
Si alguien dice: 'Yo soy amigo de Dios' y no le obedece, es un mentiroso y no dice la verdad.
Si decimos que nunca hemos hecho lo malo, hacemos que Dios aparezca como un mentiroso, y no hemos aceptado mensaje que él nos ha dado.
Si alguien se cree importante, cuando en realidad no lo es, se está engañando a sí mismo.
Quien se cree muy *santo y no cuida sus palabras, se engaña a sí mismo y de nada le sirve tanta religiosidad.
y peleas en todo momento. Y los que hacen eso son gente incapaz de pensar bien, que no conoce la verdad; son gente que piensa que por medio de la religión puede ganar mucho dinero.
¡No se engañen a ustedes mismos! Si alguno cree que es muy sabio y que sabe mucho de las cosas de este mundo, para ser sabio de verdad debe comportarse como un ignorante.
Si decimos que somos amigos de Dios y, a la vez, vivimos pecando, entonces resultamos ser unos mentirosos que no obedecen a Dios.
¡Obedezcan el mensaje de Dios! Si solo lo escuchan y no lo obedecen, se engañan a ustedes mismos y les sucederá lo mismo que a quien se mira en un espejo: tan pronto como se va, se olvida de cómo era.
Pero los malvados y los engañadores irán de mal en peor, y engañarán a unos pero serán engañados por otros.
Me alegré mucho cuando algunos miembros de la iglesia vinieron y me contaron que sigues confiando en la verdad que Jesucristo nos enseñó.
Sufrirán por lo que han hecho sufrir a otros, pues creen que serán felices haciendo a plena luz del día lo malo que se les antoja. Da vergüenza ver lo malo que hacen y el escándalo que arman cuando los acompañan a ustedes en sus fiestas de la iglesia.
El padre de ustedes es el diablo, y ustedes tratan de hacer lo que él quiere. Siempre ha sido un asesino y un gran mentiroso. Todo lo que dice son sólo mentiras, y hace que las personas mientan.
Si decimos que amamos a Dios, y al mismo tiempo nos odiamos unos a otros, somos unos mentirosos. Porque si no amamos al hermano a quien podemos ver, mucho menos podemos amar a Dios, a quien no podemos ver.