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1 Corintios 11:4 - Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)

Si el hombre ora a Dios o habla en su nombre con la cabeza cubierta, no le da a Cristo la honra que merece.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Todo varón que ora o profetiza con la cabeza cubierta, afrenta su cabeza.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

El hombre deshonra a su cabeza si se cubre la cabeza mientras ora o profetiza.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Si un varón ora o profetiza con la cabeza cubierta, deshonra su cabeza.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Todo varón que ora o profetiza teniendo algo° sobre la cabeza,° afrenta su cabeza.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Todo varón que ora o habla en nombre de Dios con la cabeza cubierta, deshonra su cabeza.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Todo varón que ora o profetiza cubierta la cabeza, deshonra su cabeza.

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Otras versiones



1 Corintios 11:4
11 Referencias Cruzadas  

En la iglesia de Antioquía estaban Bernabé, Simeón 'el Negro', Lucio el del pueblo de Cirene, Menahem y Saulo. Menahem había crecido con el rey Herodes Antipas. Todos ellos eran profetas y maestros.


Según nuestras costumbres, es una vergüenza que el hombre se deje crecer el cabello,


Y si la mujer ora a Dios o habla en su nombre sin cubrirse la cabeza, le falta el respeto a su esposo. Es lo mismo que si se afeitara la cabeza.


Algunos reciben el poder de hacer milagros, y otros reciben la autoridad de hablar de parte de Dios. Unos tienen la capacidad de reconocer al Espíritu de Dios, y de descubrir a los espíritus falsos. Algunos pueden hablar en idiomas desconocidos, y otros pueden entender lo que se dice en esos idiomas.


En la iglesia, Dios le dio una función a cada una de las partes. En primer lugar, puso apóstoles; en segundo lugar, puso profetas, y en tercer lugar, puso maestros. También hay algunos que hacen milagros, y otros que tienen la capacidad de sanar a los enfermos; algunos ayudan, otros dirigen, y aun otros hablan en idiomas desconocidos.


Si no tengo amor, de nada me sirve hablar de parte de Dios y conocer sus planes secretos. De nada me sirve que mi confianza en Dios sea capaz de mover montañas.


Y si él les da la capacidad de profetizar, no la desprecien.